Se espera que el misil balístico intercontinental (ICBM, por sus siglas en inglés) Sarmat se convierta en la columna vertebral de la disuasión nuclear rusa. ¿Cuáles son sus características? ¿Por qué Occidente le ha dado el nombre de 'Satán II'? Sputnik lo explica.
Redacción
Se espera que el misil balístico intercontinental (ICBM, por sus siglas en inglés) Sarmat se convierta en la columna vertebral de la disuasión nuclear rusa. ¿Cuáles son sus características? ¿Por qué Occidente le ha dado el nombre de 'Satán II'? Sputnik lo explica.
El misil ruso Sarmat vuelve a ser noticia. El 22 de junio, el presidente ruso Vladímir Putin anunció que los primeros lanzadores de Sarmat con un "nuevo misil pesado" entrarían en servicio de combate "en un futuro próximo".
Putin no proporcionó más detalles, excepto que Moscú continuará desarrollando su tríada nuclear que, según él, serviría como "garantía clave de la seguridad militar de Rusia y de la estabilidad mundial".
Los medios de comunicación occidentales reaccionaron inmediatamente a estos comentarios. Un medio tituló: Putin intimida de nuevo a Ucrania y al mundo con ICBMs superpesados, prometiendo desplegarlos en combate. Un importante tabloide británico adornó su título con verbos y adjetivos como "advierte" y "aterrador", y utilizó el término "Satán II", señalando que el Sarmat "supuestamente puede alcanzar al Reino Unido en solo tres minutos desde Rusia".
¿Qué es el Sarmat?
El RS-28 Sarmat es un misil balístico intercontinental de nueva generación, basado en un silo, de tres etapas, alimentado con combustible líquido y equipado con un vehículo de reentrada múltiple e independiente (MIRV, por sus siglas en ingles).
El misil tiene un alcance operativo de hasta 18.000 kilómetros, suficiente para alcanzar casi cualquier punto de la Tierra, y puede ir equipado con 10-15 ojivas, hasta dos docenas de vehículos de planeo hipersónico Avangard, o una combinación de ojivas y sistemas de contramedidas, incluidas ojivas falsas para distraer y engañar a las defensas antimisiles enemigas.
Los trabajos iniciales de desarrollo del Sarmat comenzaron en 2011, en el Centro estatal de misiles Makeyev, y se aceleraron en 2014 tras el golpe de Estado en Kiev, que cortó la cooperación de Moscú con el complejo militar-industrial ucraniano, cuya Oficina de Diseño Yuzhnoye y el gigante aeroespaciales Yuzhmash se habían encargado de la creación de misiles estratégicos pesados de largo alcance en la época soviética.
El Sarmat está diseñado para sustituir al misil R-36M2 Voyevoda, una modificación de la familia R-36 de misiles balísticos intercontinentales y vehículos de lanzamiento espacial que se desarrolló en la década de 1960 y cuya variante mejorada Voyevoda se puso en servicio por primera vez en 1988.
El nuevo misil pesado ha sido promocionado como la respuesta rusa al Prompt Global Strike (PGS), el ambicioso (y peligroso) concepto ideado por los planificadores del Pentágono que propone ataques preventivos masivos convencionales con misiles de crucero para desarmar al adversario y decapitar a sus dirigentes.
El concepto PGS —desvelado poco después de que Estados Unidos se retirara del Tratado sobre Misiles Antibalísticos con Rusia en 2002— empujó al país euroasiático a desempolvar los planes para la creación de una gama de armas avanzadas, incluidos misiles hipersónicos y vehículos de planeo, y eventualmente el Sarmat, todo ello en un esfuerzo por impedir que los líderes militares estadounidenses pudieran llegar a la conclusión de que Washington podría lanzar un ataque sorpresa contra Rusia, convencional o de otro tipo, sin evocar una respuesta devastadora y potencialmente letal para el mundo entero.
El Boletín de los Científicos Atómicos estima que cada una de las ojivas nucleares del Sarmat tiene una potencia explosiva de hasta 500 kilotones, suficiente para arrasar por completo una gran área metropolitana. A modo de comparación, los ataques nucleares norteamericanos contra Hiroshima y Nagasaki en agosto de 1945 tuvieron una potencia explosiva de "solo" 15 y 21 kilotones, respectivamente, pero destruyeron ambas ciudades y mataron a más de 225.000 personas.
La doctrina nuclear rusa restringe el uso de armas nucleares a una represalia ante un ataque enemigo importante con armas de destrucción masiva o un ataque convencional tan grave que se considere que está en juego la integridad del Estado. Eso significa que Rusia nunca utilizará sus Sarmat, ni ninguna de sus otras armas nucleares, tácticas y estratégicas, a menos que exista una amenaza así de grave.
¿Qué significa el nombre Sarmat y por qué lo apodan "Satán II" en Occidente?
El Sarmat debe su nombre a los sármatas, una confederación de antiguos nómadas ecuestres del Este de Irán que, se cree, vivieron en la estepa póntica-caspiana desde el siglo III a.C. hasta el siglo IV d.C., y que eran conocidos por su avanzada cultura, su uso de la tecnología y su código guerrero femenino.
La OTAN designa al Sarmat como misil "SS-X-29" o "SS-X-30", pero los medios de comunicación occidentales suelen llamarlo "Satán II", presumiblemente por las terroríficas asociaciones del término con el mal y el sufrimiento. En realidad, la nomenclatura "Satán II" procede del nombre de informe de la OTAN "SS-18 Satán" utilizado para el misil R-36M, el sistema de misiles al que el Sarmat está destinado a sustituir, pero que nunca ha sido utilizado por los militares rusos.
¿Cuándo entrará en servicio el Sarmat?
En abril de 2022, el Ejército ruso realizó con éxito una prueba de lanzamiento del Sarmat desde el cosmódromo de Plesetsk. En agosto se firmó un contrato estatal para la fabricación de los misiles y, en noviembre, comenzó la producción en serie. Se espera que los primeros misiles Sarmat, fabricados por la planta de construcción de maquinaria de Krasnoyarsk (KrasMash), se entreguen al Ejército y entren en operaciones antes de finales de 2023.
¿Cuál es el análogo estadounidense del Sarmat?
En la actualidad, Estados Unidos no tiene un análogo del Sarmat, ya que sus misiles balísticos intercontinentales Minuteman LGM-30, basados en silos, tienen un alcance operativo de hasta 13.000 kilómetros, un peso de lanzamiento de entre 170 y 335 kilotones y hasta tres MIRV, y Washington prefiere mantener su artillería nuclear más pesada a bordo de su flota de submarinos nucleares.
El país norteamericano no tiene el mismo tipo de restricciones sobre el uso de armas nucleares que Moscú, y la Revisión de la Postura Nuclear de 2022 de la Administración Biden permite el primer uso nuclear e incluso ataques nucleares contra Estados no poseedores de armas nucleares.