La embajada de Israel amenaza a los estudiantes españoles y a los centros educativos, señalando a los estudiantes por convocar la huelga del 16 de noviembre y a las AMPAS y profesores por los actos de apoyo a Palestina en los centros educativos.
Además, se inventa unos casos de supuestas agresiones a alumnos israelíes en España que no documenta, exigiendo al Gobierno que PROHIBA esas protestas.
Enlace al
tweet de la embajada sionista.
El ejército español se postula a favor de evitar que en Israel caigan bombas, pero no al revés, según declaraciones del general Aroldo Lázaro. Y según palabras del general Luis Fernández Herrero, “tenemos la capacidad y la preparación para operar en este entorno e incluso si escala a un entorno un poquito más complicado”.
Se pueden poner soldaditos en Irak, en Serbia, en Afganistán, en Líbano, en Letonia o, incluso, en el coño de la Bernarda; pero, ahora bien, a la hora de proteger las aguas territoriales de Canarias o a la población del Sáhara, robados por Marruecos, para eso no hay "ejército español".
Tener un ejército que no protege a su población y solo sigue intereses extranjeros debería llamar a la reflexión de este general y sus colegas…
Suspendidos dos grupos estudiantiles de EEUU por protestas propalestinas
La universidad estadounidense de Columbia suspendió dos grupos estudiantiles por organizar protestas para pedir el fin de la guerra israelí contra la Franja de Gaza.
Gerald Rosberg, presidente del comité especial de seguridad del campus de la universidad, anunció el viernes que la sanción contra las agrupaciones “Estudiantes por la Justicia en Palestina” y “Voz Judía por la Paz” se mantendrá durante todo el semestre otoñal.
Según Rosberg, la decisión se basa en “violaciones repetidas” de las políticas universitarias relacionadas con la organización de eventos en el campus.
Una protesta organizada por los dos grupos sancionados atrajo el jueves a cientos de estudiantes de la Universidad de Columbia, quienes abandonaron sus clases para exigir un alto el fuego en la Franja de Gaza.
Los estudiantes demandaron que la universidad calificara el asedio israelí a Gaza como un “genocidio” y reclamaron la retirada de las inversiones de la universidad en instituciones israelíes.