El Desinformador Ruso
El Centro Nacional de Inteligencia está sufriendo, sin duda alguna, el peor año de su historia, y la mierda va llegando desde la A-6 hasta el Paseo de la Castellana.
Dos
artículos periodísticos desvelan los acuerdos armamentísticos que el CNI
mantiene desde hace años con el régimen genocida de Israel y la dictadura saudí responsable de cientos de miles de muertes de civiles en Yemen. Algo que va desde la época de Zapatero, pasando por Rajoy y hasta Pedro Sánchez.
Mientras el CNI sigue manteniendo acuerdos con estados genocidas, Maduro volvió a
acusar a España de estar detrás del intento de magnicidio,
ordenando a los militares reforzar los planes antiterroristas en respuesta a las actividades terroristas de Estados Unidos y España en territorio venezolano,
Por otro lado, tras
aprobarse la proposición de ley que vincula más al Centro Nacional de Ineptos al presidente del gobierno español, los mortadelos se
sulfuran, y "avisan" de que el triple control judicial que Sánchez cede al PNV «hará imposible muchas misiones». ¿Qué misiones?¿Las de forrarse con armas y tecnología de los genocidas de ISISrael? ¿Las de seguir escondiendo las pruebas de los atentados de Las Ramblas? Porque en lo que respecta al último punto, desde el CNI se siguen "resistiendo" a
desclasificar las pruebas. ¿Por qué será? En cualquier caso, las risas las tendremos garantizadas, ya que el Congreso ha autorizado a Iñigo Errejón para conocer secretos oficiales, fondos reservados y actuaciones del CNI.
- La ministra de Defensa española mantuvo una videoconferencia con los mandos de la Guardia Nacional de Fronteras de Ucrania, "reforzando la coordinación fluida y eficaz del apoyo español a Ucrania", dice el ministerio en una publicación en X.
Y terminamos el romántico post de hoy con retrosabores noventeros: múltiples
fuentes señalan que el CESID (CNI) hizo pagos millonarios procedentes de fondos reservados a la amante del "emérito" Bárbara Rey.
Amante, chantaje y 23F: los escandalosos audios del rey emérito de España
Las revelaciones sobre el rey emérito de España,
Juan Carlos I, no cesan. Después de la publicación de las fotografías que confirmaban una de sus relaciones extramatrimoniales, se han divulgado explosivos audios del entonces monarca con su amante Barbara Rey.
En uno de ellos,
publicados por la prensa local, se remonta a los años 90. En ese entonces, Juan Carlos celebraba que el general Alfonso Armada, el principal condenado por el intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981, no dijera "ni una palabra".
"Palabra de honor. Me río, cariño, de Alfonso Armada. Ese ha pasado siete años en la cárcel, se ha ido a su pazo de Galicia y el tío jamás ha dicho una palabra. ¡Jamás! En cambio, éste otro está largando…", dice en la conversación con Rey, la vedette y actriz con quien mantenía un romance y quien grabó los audios.
Armada fue condenado a 30 años de prisión, aunque solo cumplió siete, al ser indultado durante el Gobierno de Felipe González por alegar razones de salud. El general falleció 25 años más tarde en su pazo gallego.
El monarca también le habla a su amante de su desconfianza hacia Sabino Fernández Campo, jefe de la Casa Real entre 1990 y 1993, al que acusaba de estar "largando" sobre su vida. "Él dice que yo he conseguido que la reina esté en contra de él", añade.
En
otra llamada,
Juan Carlos trata el asunto de la huida del exdirector de la Guardia Civil, Luis Roldán, investigado por corrupción y apropiación indebida, que huyó al sureste asiático en 1994.
"Yo espero que lo encuentren", le decía el monarca a Bárbara Rey, para después matizar: "Aunque entre tú y yo, la Guardia Civil dice que es mejor que no lo encuentren. Mejor encontrarlo muerto". Roldán fue detenido poco después y cumplió 15 años de prisión.
Entre los audios difundidos también hay
uno en el que Bárbara Rey, muy enfadada, arremete contra el monarca: "
El Rey está en deuda conmigo. Porque no lo he sido nunca, pero si tengo que serlo, como puta, voy a ser la más cara del mundo", amenaza.
No se sabe si con esas palabras se refería a los presuntos chantajes a los que la vedette habría sometido a Juan Carlos I, a cambio de que no viera la luz el material que los comprometía a ambos. El mismo medio afirma que, entre 1996 y 1997, agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) depositaron enormes cantidades de dinero, provenientes de fondos reservados públicos, a la amante del monarca.
"A mí me van a matar, pero me van a matar con la cabeza muy alta y sabiendo el mundo entero a qué persona me he enfrentado, y con qué persona he estado, y qué persona ha engañado a este país", decía Bárbara Rey en la misma grabación.
En diversas intervenciones en varios medios, el hijo de Bárbara Rey, Ángel Cristo Jr., quien vendió las
polémicas fotografías de su madre con el monarca, ha
asegurado que ella recibió dinero a través de chantaje.
En defensa de Bárbara Rey ha salido su hija, Sofía Cristo, que sostiene que en los audios "
se ve una mujer desesperada y aterrada que está intentando defenderse de algo muy gordo", en
declaraciones recogidas por Europa Press.
Aumentan las tensiones entre la reina Letizia y el rey Felipe VI
Según publica El Nacional.cat, el ambiente en la Casa Real española ha alcanzado un punto de tensión máxima en las últimas semanas a raíz de las fotos publicadas en las que aparece el rey emérito Juan Carlos I y la vedete Bárbara Rey en plan cariñoso. Sin embargo, aunque el protagonista es el pare de Felipe VI, lo cierto es que la reina Letizia también está en el centro del huracán.
Según un comunicado emitido recientemente por el gabinete de prensa de la
Casa Real,
Letizia se ausentará del próximo viaje oficial a Jordania, donde el rey
Felipe VI será recibido por los Reyes
Rania y
Abdalá del Reino Hachemita. Aunque el motivo oficial dado es el conflicto bélico en Oriente Medio, el hecho de que
Felipe sí viaje sugiere que hay otras razones de fondo que explican esta decisión.
Este no es el primer compromiso oficial del que Letizia se ausenta en los últimos meses, lo que ha alimentado los rumores de que la Casa Real está tomando medidas drásticas para apartarla del primer plano. Las tensiones en el núcleo de la familia real han ido en aumento, y la ausencia de la reina parece ser un castigo velado por las desavenencias y las imposiciones que ella misma ha hecho.
Uno de los puntos más conflictivos ha sido la
reunión entre la princesa
Leonor y el rey emérito
Juan Carlos I, un encuentro que Letizia no aceptaba. La relación entre
Letizia y
Juan Carlos nunca ha sido fácil, y el regreso del rey emérito al entorno familiar ha sido otro motivo de discordia. Las recientes fotos de
Juan Carlos y
Bárbara Rey han vuelto a colocar a la monarquía en el punto de mira mediático.
Según El Nacional, además, se especula que las fotos con Bárbara Rey son solo "la punta del iceberg", y que podrían aparecer más documentos comprometidos sobre la vida personal del rey emérito, lo cual no haría más que agravar la situación. Este tipo de situaciones hace que Letizia se sienta cada vez más aislada, especialmente al recordar que ella misma fue duramente criticada por su relación con Jaime del Burgo en el pasado, un episodio que la colocó bajo el foco mediático. Ahora, sin embargo, la situación es aún peor porque involucra a toda la familia, incluida la reina emérita Sofía, que, según se rumorea, siempre supo más de lo que aparentaba sobre los escándalos de su esposo.
La mala relación de Letizia con las infantas Cristina y Elena también ha sido un tema recurrente. Las desavenencias entre las cuñadas son de sobra conocidas, pero la aparición de una fundación en Abu Dabi para gestionar la herencia de Juan Carlos I ha sido la gota que colmó el vaso. Letizia no ve con buenos ojos que Felipe permita la reintegración de su padre y la cercanía de sus hermanas, lo que ha intensificado la tensión en la familia.
Letizia levanta sospechas como la chivata que escampa las miserias de Juan Carlos I
Durante años,
Juan Carlos I ha pasado largas temporadas en España, alternadas con viajes al extranjero, especialmente desde que su hijo, el rey Felipe VI, levantó el veto que pesaba sobre él debido a ciertos comportamientos controvertidos.
Uno de los temas que ha causado mayor revuelo es la publicación de una información que afirma que el marido de la reina Sofía habría creado una fundación con el propósito de asegurar la herencia de sus hijas, las infantas Elena y Cristina, eludiendo así que su patrimonio pase por la Hacienda Pública. Este movimiento ha generado una gran controversia y preocupación en la Casa Real, ya que una vez más, la figura de Juan Carlos I se asocia a manejos financieros dudosos. Además, se ha rumoreado que en las próximas semanas saldrá a la luz un libro de memorias del exmonarca, en el cual repasará su trayectoria como rey, abordando tanto sus logros como sus errores.
Agárrense, que vienen curvas…