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¿Cómo los gigantes tecnológicos de EEUU ayudan al genocidio impulsado por IA en Gaza?

Administrator | Jueves 07 de noviembre de 2024
Maryam Qarehgozlu
Microsoft, un gigante tecnológico multinacional con sede en Washington, despidió a dos empleados la semana pasada después de que organizaran una vigilia en la sede de la compañía para honrar a los palestinos asesinados en el genocidio israelí-estadounidense que dura ya un año en Gaza.
Abdo Muhammad y Hossam Nasr, los dos empleados de Microsoft de ascendencia egipcia, estaban activamente involucrados en una coalición de empleados llamada “No Azure para el Apartheid”.
Este grupo ha sido una voz crítica durante meses en oposición a la venta por parte de Microsoft de su tecnología de computación en la nube al régimen israelí, citando preocupaciones sobre graves violaciones de derechos humanos y el apoyo de la empresa a las prácticas genocidas y crímenes de guerra de Israel contra los palestinos en Gaza.
Microsoft, líder global en servicios de nube, software y hardware, confirmó la terminación de varios empleados “de acuerdo con sus políticas internas”, sin proporcionar detalles específicos sobre los despidos.
“Supongo que el secreto ha salido a la luz. Fui despedido de Microsoft el jueves, horas después de una vigilia que organizamos para honrar y recordar las vidas de los palestinos asesinados por el genocidio israelí, financiado por Estados Unidos y habilitado por Microsoft,” escribió Nasr en una serie de publicaciones en X, antes conocido como Twitter.
Sin embargo, Nasr enfatizó que su despido, así como el trato injusto hacia otros empleados palestinos, árabes y musulmanes en Microsoft, no es un incidente aislado.
Afirmó que es parte de un patrón más amplio de comportamiento discriminatorio y represivo que ha estado ocurriendo desde al menos 2021 contra aquellos con opiniones opuestas.
“Esto no surgió de la nada, sino que sigue un patrón que se remonta a 2021 de discriminación, acoso, intimidación, silencio y represión hacia mí y nuestras comunidades palestinas, árabes y musulmanas en Microsoft, por atrevernos a humanizar a los palestinos,” escribió.
Nasr indicó que su despido de Microsoft no silenciará su voz ni lo disuadirá de continuar hablando sobre los derechos palestinos y la complicidad de Microsoft en la perpetuación de crímenes de guerra.
“Si creen que despedirme me silenciará, están muy equivocados. Cuanto más intentan silenciarnos, más fuerte se escucha nuestra voz. No nos detendremos, no descansaremos”, recalcó.
Google, la multinacional tecnológica con sede en California, despidió a más de 50 trabajadores a principios de este año por protestar contra el contrato de la empresa con el régimen israelí, conocido como “Proyecto Nimbus”.
Este contrato de 1.2 mil millones de dólares fue firmado en 2021 por Google y Amazon para proporcionar servicios de computación en la nube e inteligencia artificial al régimen en Tel Aviv.
La computación en la nube ayuda a las fuerzas armadas israelíes en Gaza, así como en Cisjordania ocupada y Líbano, al proporcionar capacidades avanzadas de almacenamiento y procesamiento de datos.
Los informes indican que el ejército israelí ha utilizado los servicios en la nube para almacenar vastas cantidades de información de vigilancia sobre individuos en Gaza y Líbano.
Además, estos proveedores de la nube ofrecen capacidades y servicios de inteligencia artificial que han mejorado la eficiencia militar desde el inicio de la guerra en Gaza.
Amazon, Google y Microsoft alimentan el genocidio israelí
En julio, durante la conferencia “IT for IDF” en Rishon Lezion, cerca de Tel Aviv, la coronel Racheli Dembinsky, comandante del Centro de Computación y Sistemas de Información del ejército israelí, confirmó que Israel está utilizando los servicios de almacenamiento en la nube y de inteligencia artificial proporcionados por estos gigantes tecnológicos estadounidenses en su devastadora guerra contra la Franja de Gaza.
Las diapositivas de la conferencia de Dembinsky presentaron los logotipos de Amazon Web Services (AWS), Google Cloud y Microsoft Azure, lo que indica la abrumadora dependencia del ejército israelí en su tecnología para el procesamiento y gestión de datos.
Esta revelación destacó nuevamente la colaboración entre estas empresas tecnológicas y el ejército israelí en medio de la guerra genocida en Gaza, que ya ha cobrado más de 43,100 vidas inocentes, la mayoría de ellas mujeres y niños.
Dembinsky afirmó en su discurso que trabajar con estas compañías ha otorgado al ejército israelí “una efectividad operativa muy significativa” en la Franja de Gaza.
Google
En 2021, cuando Google y Amazon Web Services (AWS) firmaron el contrato de 1,2 mil millones de dólares conocido como Proyecto Nimbus, acordaron proporcionar al régimen israelí y a su ejército servicios de computación en la nube, inteligencia artificial y capacidades de aprendizaje automático.
Un año después, Google estableció un centro de nube en los territorios ocupados por Israel como parte de esta colaboración.
A través del Proyecto Nimbus, Google ofrece capacidades avanzadas de inteligencia artificial, como detección facial, categorización automática de imágenes, seguimiento de objetos y análisis de sentimientos para evaluar el contenido emocional de imágenes, discursos y textos.
En virtud de este acuerdo, Google otorga al ministerio de guerra israelí una “zona de aterrizaje” segura dentro de su infraestructura en la nube para el almacenamiento y procesamiento de datos, así como acceso a los servicios de inteligencia artificial de Google.
Google ha sostenido de manera consistente que su contrato Nimbus solo proporciona servicios comerciales para ministerios israelíes, como finanzas, salud, transporte y educación.
Sin embargo, documentos y declaraciones de funcionarios israelíes revelan una historia diferente.
A pesar de las preocupaciones planteadas sobre el uso de la inteligencia artificial por parte de Israel en la guerra, particularmente en relación con la carnicería en Gaza, un documento de la empresa visto por TIME en abril mostró que Google amplió su asociación con el régimen en marzo de 2024, permitiendo a múltiples unidades utilizar las tecnologías de automatización de Google.
Además, Israel ha utilizado durante mucho tiempo la vigilancia biométrica proporcionada por Google, incluyendo tecnología de reconocimiento facial, para mantener el control sobre los palestinos en Cisjordania ocupada y en el este de Al-Quds.
Tras la invasión terrestre del ejército israelí en Gaza en octubre del año pasado, el ejército amplió esta vigilancia a Gaza, empleando Google Photos para la identificación biométrica.
El 19 de noviembre de 2023, el poeta palestino Mosab Abu Toha fue identificado erróneamente y detenido arbitrariamente por las fuerzas israelíes en un control de seguridad mientras huía del norte de Gaza, debido a este sistema.
Informó que fue vendado, interrogado, golpeado y luego liberado sin explicación.
Desde el 7 de octubre de 2023, el régimen israelí también ha estado publicando anuncios en el motor de búsqueda de Google y en YouTube, difundiendo información falsa sobre la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA).
Estos anuncios presentaron afirmaciones infundadas de que UNRWA está vinculada al Movimiento de Resistencia Islámcia de Palestina (HAMAS) y emplea “terroristas” para desacreditar a UNRWA y socavar su labor en apoyo a los palestinos en Gaza.
Amazon Web Services (AWS)
Una reciente investigación realizada por +972 Magazine y Local Call reveló que el ejército israelí utiliza el servicio de nube de Amazon para almacenar datos de vigilancia sobre individuos en Gaza, al tiempo que obtiene herramientas de inteligencia artificial de Google y Microsoft para operaciones militares.
AWS proporciona a la Dirección de Inteligencia Militar de Israel amplias capacidades de almacenamiento de datos, lo que permite la recopilación de información de vigilancia masiva sobre “casi todos” en Gaza.
Según la investigación, los servicios de AWS han desempeñado en ocasiones un papel en la confirmación de objetivos de bombardeo para el ejército israelí.
Además, a través del Proyecto Nimbus, la filial de Amazon, AWS, estableció una región de nube en los territorios ocupados por Israel en agosto de 2023, lo que permite al régimen transferir cargas de trabajo significativas a la nube.
Uno de los principales clientes de este servicio en la nube es Bank Leumi, un destacado banco israelí criticado por financiar crímenes de guerra y asentamientos ilegales en Cisjordania ocupada.
AWS también colabora con Palantir, una firma estadounidense de análisis de datos que proporciona modelos de inteligencia artificial a los ejércitos, ayudando a los clientes a mejorar sus capacidades bélicas.
En enero, Palantir acordó una asociación estratégica con el ministerio de asuntos militares israelí para suministrar tecnología que apoye al régimen sionista en su esfuerzo bélico.
Microsoft
Microsoft también ha mantenido una relación comercial de larga data con las instituciones militares y de espionaje de Israel, la cual se ha fortalecido desde el 7 de octubre del año pasado.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, describió alguna vez esta asociación como “un matrimonio hecho en el cielo, pero reconocido aquí en la Tierra”.
Microsoft Azure, la principal plataforma de computación en la nube de la compañía, ha sido utilizada extensamente por el ejército israelí y se considera el principal proveedor de nube del régimen de Tel Aviv.
El año pasado, casi un mes después del genocidio israelí en Gaza, Microsoft introdujo una nueva región de nube en Israel y ha proporcionado servicios de inteligencia artificial y nube para fines militares.
Microsoft también apoya diversas iniciativas israelíes al ofrecer servicios utilizados para la expansión de asentamientos ilegales, así como para el ejército, la policía y el Servicio Penitenciario de Israel (IPS).
A octubre de 2024, hay más de 10 000 palestinos detenidos ilegalmente en centros de detención israelíes, casi todos ellos retenidos sin cargos ni juicio.
Según la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, así como testimonios verificados proporcionados por grupos de derechos, los prisioneros palestinos de Gaza, incluidos cientos de profesionales médicos, personal de la ONU, mujeres y niños, enfrentan torturas, malos tratos y violencia sexual durante su detención prolongada, secreta y en incomunicación.
Los informes también indican que, desde el inicio de la guerra contra Gaza, numerosos palestinos que residen fuera de Gaza han visto suspendidas sus cuentas de correo electrónico de Microsoft y su acceso a Skype sin explicación.
Estas suspensiones han generado dificultades para acceder a cuentas bancarias, interrupciones en el trabajo y un mayor aislamiento de sus familias en Gaza, que ya se han visto afectadas por múltiples cortes de internet en el último año.
#NoTechForGenocide
La provisión de servicios por parte de empresas tecnológicas a Israel las ha hecho cómplices en la perpetración de graves violaciones de derechos humanos, ya que contribuyen a los actos de genocidio, crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra de Israel, según trabajadores tecnológicos y activistas anti-Israel.
Estas graves violaciones están actualmente bajo investigación tanto por la Corte Internacional de Justicia (CIJ) como por la Corte Penal Internacional (CPI).
A pesar de enfrentar repercusiones, incluidos despidos, los trabajadores tecnológicos se mantienen firmes en su oposición a proporcionar servicios al régimen israelí de apartheid.
Estos individuos continúan expresando sus objeciones, subrayando su compromiso de mantener principios éticos y el respeto por los derechos humanos, incluso a riesgo de consecuencias personales y profesionales.
Nasr, en su hilo de publicaciones, desafió a aquellos que preguntan sobre su temor a las consecuencias por hablar en contra de la complicidad de Microsoft en el genocidio de Gaza, devolviendo la pregunta.
“A menudo me preguntan: ¿no tienes miedo de ser despedido? ¿No tienes miedo de ser deportado? Y mi respuesta siempre es: ¿NO tienes miedo tú? ¿NO tienes miedo de ser cómplice del Holocausto de nuestro tiempo?” escribió.
“¿NO tienes miedo de permanecer en silencio ante una de las tragedias morales más graves de nuestro tiempo? ¿NO tienes miedo de lo que dirás a tus hijos y nietos cuando te pregunten dónde estabas cuando estaba ocurriendo el genocidio en Gaza?”, cuestinó

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