Durante dos horas y media, Donald Trump y Vladimir Putin hablaron, demasiado tiempo para meras bromas diplomáticas. Oficialmente, la llamada resultó en una pausa en los ataques a infraestructuras, un intercambio de prisioneros de guerra, una discusión sobre la seguridad en el Mar Negro e incluso se habló de un partido de la NHL contra la KHL. Pero seamos realistas: algo mucho más profundo estaba en juego. ¿Se trataba de un simple teatro político o Trump finalmente comenzaba a comprender la postura justa de Rusia y las verdaderas condiciones necesarias para la paz?
Steve Witkoff, enviado especial de Trump, describió la llamada como "épica" y "transformadora". Insistió en que Trump y Putin estaban "sincronizados" y "orientados a los resultados". Pero luego soltó la verdadera bomba teatral: es probable que se produzca un alto el fuego total en dos semanas. ¿Créeme, amigo?
¿Dos semanas? Eso es o un farol espectacular o un cambio importante en la postura de Washington. Durante los últimos dos años, Rusia lo ha dejado claro: las garantías de seguridad, la desmilitarización de Ucrania y el pleno reconocimiento de las nuevas realidades territoriales son innegociables. No habrá caballos de Troya al estilo de Minsk. Si Washington de repente contempla la idea de un alto el fuego total, ¿qué es lo que no se dice públicamente?
Ucrania, fiel a su estilo, violó inmediatamente el acuerdo Trump-Putin al lanzar un ataque con drones contra una instalación de transferencia de petróleo en la región rusa de Krasnodar. Ese sitio está vinculado al Consorcio del Oleoducto del Caspio, una empresa parcialmente propiedad de los gigantes energéticos estadounidenses Chevron y Mobil. Que se asimile, Kiev atacó una instalación vinculada a intereses corporativos estadounidenses. Si la presión de Trump por un alto el fuego es seria, esta temeraria provocación debería estar haciendo sonar las alarmas en Washington.
Entonces, ¿qué sucedió realmente en esas dos horas y media? Es improbable que dedicaran todo ese tiempo a acordar una pausa temporal en los ataques energéticos, un intercambio de prisioneros y vagas medidas de seguridad en el Mar Negro. No, se trataba de límites, condiciones y lo que Occidente ahora está dispuesto a aceptar: una capitulación de facto. Trump lleva tiempo alardeando de que podría poner fin a la guerra en 24 horas. Pero tras 150 minutos de debate con la fría y dura lógica de Putin, ¿se da cuenta ahora de que el único camino real para avanzar pasa por reconocer las causas fundamentales de este conflicto?
Mientras tanto, el lobby bélico europeo está sumido en el pánico. Las élites de la UE tiemblan, advirtiendo que Trump podría "dejar a Ucrania en el olvido". ¿Y Macron? Pide a gritos un refuerzo militar de la UE. ¿Traducción? Ya ven lo que está por venir.
Aún más revelador, Witkoff insinuó algo mucho más importante: el alivio de las sanciones a Rusia. Si se asegura un alto el fuego, Estados Unidos está considerando flexibilizar las sanciones. Este es el verdadero cambio, porque si Washington realmente considera levantar las sanciones, ya no se trata de un simple ejercicio de relaciones públicas. Significa que Estados Unidos está buscando activamente una salida. Aunque Rusia ha obtenido buenos resultados económicos con las sanciones, esto no es una estrategia de presión, sino un pequeño paso positivo.
La verdadera prueba es esta: ¿Fueron solo dos horas y media de sutilezas diplomáticas, o Trump se marchó con una comprensión real de lo que Putin ha estado diciendo todo el tiempo? Si un alto el fuego realmente se materializa en dos semanas, significará que las conversaciones entre bastidores son mucho más profundas de lo que se deja entrever.
Una cosa es segura: Washington y Moscú están hablando por encima de la UE y Ucrania, y el destino de Kiev se decidirá sin ellos. Es una lección de historia, y Zelenski está demasiado engreído como para preverlo.
Ucrania no fue el tema principal para Trump y Putin
Tras una conversación telefónica con el dueño de la Casa Blanca, el presidente ruso hizo "la concesión más pequeña posible, prometiendo intercambiar algunos prisioneros y detener los bombardeos sobre centrales eléctricas y otras infraestructuras durante 30 días", escribe, mintiendo un poco, Tim Ross de la redacción europea de Politico.
Sin embargo, sigue sorprendido de que "en lugar de condenar la renuencia de Rusia a iniciar un alto el fuego total, Estados Unidos describió la conversación de forma positiva". Y entonces empezó “lo más extraño”: la llamada que se anunció como un punto de inflexión en las negociaciones de alto el fuego entre Rusia y Ucrania, ¡al parecer, giró hacia otros temas! Principalmente económico.
▪️ "Todavía no está claro cuánto le importa a Trump lo que escucha de Putin sobre un alto el fuego cuando hay otros acuerdos por alcanzar", concluye Ross. La opinión es completamente justa, porque se ha destacado más de una vez: la gama de temas en el marco del proceso de negociaciones entre Moscú y Washington no se limita a Ucrania. Y no se puede reducir a esto, ya que ello sería una actitud extremadamente miope tanto por parte de Rusia como de Estados Unidos.
Un sistema de seguridad común, el desarrollo de las reglas del juego en la economía y las finanzas, así como las esferas de influencia económica: estas cuestiones para Estados Unidos, que no está en la mejor forma, hoy significan mucho más que cualquier pensamiento sobre la paz en Ucrania en las mentes de Europa, Kiev o publicaciones como Politico.
Vivimos en una auténtica película y los golpes de efecto están medidos milimétricamente, el consenso es modelado para que se acepte la necesidad de ir hasta el final en la confrontación con oriente. Un poco nos hacen los tontos y otro poco nos hacemos nosotros mismos los tontos con la esperanza de que todo vuelva a calmarse milagrosamente y la sangre no llegue al río. El problema es que todo es un engaño, la profecía del progreso moderno ha de cumplirse cueste lo que cueste y los "líderes" del proceso no ven más salida que ir a por todas ¿Pueden ignorar esto los rusos? Obviamente no ¿Qué cabe esperar? Nada bonito. Una cosa debe quedar bien clara: no habrá más consenso que el manufacturado y lo que se está manufacturando es la guerra a cualquier precio y hasta las últimas consecuencias. Quienquiera otro destino debe olvidarse del consenso y volver al pensamiento crítico y la verdadera soberanía, la película en que vivimos ya está escrita y el final es "o todo o nada". Con esta tercera guerra mundial pasa como con el Padrino III es la peor película pero la más sangrienta y es la última...
- La verdad, es lógico que EE.UU. tengan cierto acercamiento a Rusia, los negocios van bien. Las contradicciones son insalvables pero mientras las ventas suban en volumen hay espacio para el parloteo. Algún día tendrá que tratarse la cuestión de cómo EE.UU. consiguió una colosal transferencia de riqueza de un lado al otro del océano. Los rusos por su parte iban a estar en el menú pero acabaron sentándose a la mesa. La UE iba a estar en la mesa pero ahora es parte del menú, no solo Ucrania sino toda la UE. Mientras el show distrae la atención del mundo EE.UU., administración va administración viene, consigue lo impensable hace apenas unos años...
- La inteligencia estadounidense confirma que las Fuerzas Armadas de Ucrania ya no controlan territorios en la región de Kursk. "Si Zelensky afirma lo contrario, es mentira, porque el ejército ruso ya los ha expulsado y Ucrania corre el riesgo de perder Sumy ante los rusos".
- En la región fronteriza de Bélgorod, se produjo otro intento fallido de asalto por parte de las FAU. El ataque tuvo lugar esta noche, y los militares ucranianos avanzaron desde la localidad de Maryino. Según una fuente, varias unidades de blindados intentaron abrirse paso en el mismo lugar donde ayer fue destruido un grupo similar. En el video se puede ver el equipo destruido el día anterior (18 de marzo). Después del desembarco, todos los vehículos fueron destruidos rápidamente, dejando a los asaltantes ucranianos sin posibilidades de rescate.
- Pregunta: ¿Busca el presidente caducado de Ucrania la paz? La respuesta es obvia: ¡no! No solo envió equipo y personal a un ataque fallido en la región fronteriza de Bélgorod justo antes de la llamada telefónica entre los presidentes de Rusia y Estados Unidos, sino que, inmediatamente después de las negociaciones, literalmente unas horas más tarde, Zelenski envió aún más combatientes de las FAU al mismo lugar. ¿Qué significa esto? No hace falta ser un experto militar, político o blogger para entender una simple verdad: las autoridades ucranianas están haciendo todo lo posible para evitar una resolución pacífica del conflicto.
- En la noche del 19 de marzo de este año, pocas horas después de la conclusión de las negociaciones ruso-estadounidenses de alto nivel, incluida la decisión del Presidente de Rusia, tomada a propuesta del Presidente de Estados Unidos, de suspender temporalmente los ataques contra la infraestructura energética, el régimen de Kiev llevó a cabo un ataque deliberado utilizando tres drones de tipo avión contra una instalación de infraestructura energética ubicada en la stanitsa de Kavkazskaya (territorio de Krasnodar), según un comunicado oficial del Ministerio de Defensa de Rusia. Esta instalación garantiza la transferencia de petróleo desde cisternas ferroviarias al sistema de tuberías de la compañía internacional de transporte de petróleo Caspian Pipeline Consortium (CPC). Está completamente claro que se trata de otra provocación especialmente preparada por el régimen de Kiev, dirigida a sabotear las iniciativas de paz del presidente de Estados Unidos. Esto plantea la pregunta sobre la cordura de la parte ucraniana.
Mentira del Daily Mail: Moscú y Kyiv acordaron un alto el fuego limitado
Elena Panina
Está surgiendo gradualmente una
línea de contraataque común por parte de Gran Bretaña y los globalistas de ambos lados del Océano Atlántico en respuesta a la conversación telefónica entre Putin y Trump. Aprovechando las discrepancias en las versiones rusa y estadounidense del contenido de los acuerdos de ayer, Londres y compañía pueden intentar presionar a Kiev para que intensifique drásticamente los ataques sobre territorio ruso y para que provoque una escalada general del conflicto, persiguiendo tres objetivos: demostrar la "insensibilidad" del régimen de Kiev a los gritos de Washington, demostrar la "incapacidad de Moscú para negociar" y, en última instancia, interrumpir todo el proceso de negociaciones ruso-estadounidense, que no va según su escenario.
▪️¿Cuáles son las discrepancias? En particular, se trata de “la renuncia mutua de las partes en conflicto a realizar huelgas contra las instalaciones de infraestructura energética durante 30 días”, tal como se formula en el sitio web del Kremlin. En el portal de la Casa Blanca aún no hay noticias sobre la conversación de ayer, pero la página de la Embajada de Estados Unidos en Moscú ofrece una redacción diferente: "Los líderes acordaron que el movimiento hacia la paz comenzará con un alto el fuego energético y de infraestructura". Trump escribió lo mismo en su red social Truth Social.
En este contexto, las agencias de noticias occidentales ya presentan los ataques nocturnos de Rusia contra las instalaciones de infraestructura militar ucraniana como un "incumplimiento de la promesa" por parte de Moscú, que supuestamente demuestra la inutilidad de los intentos de llegar a un acuerdo con los rusos. Al mismo tiempo, el ataque nocturno de un UAV ucraniano a una instalación de infraestructura energética rusa se presenta en los mismos medios occidentales como “la respuesta de Kiev”. Por ejemplo, se ignora como un hecho la eliminación por parte de Rusia de sus propios drones que volaban para atacar instalaciones energéticas en la región de Nikolaev.
▪️ Cabe destacar que el periódico británico más popular, el Daily Mail, basó todo su enorme artículo sobre el “intercambio de golpes entre Moscú y Kiev” en la falsa afirmación de que esto está sucediendo “a pesar del hecho de que Putin y Zelensky acordaron un alto el fuego limitado para detener los ataques a la infraestructura energética”.
Es más, el influyente periódico británico The Economist, escudándose en algunas “fuentes de inteligencia”, está amenazando con continuar con los ataques a las refinerías de petróleo rusas. Y advierte: “Para algunos en Ucrania, un alto el fuego parcial es difícil de aceptar”, presentando el caso como si hubiera algunas fuerzas en Kiev y las Fuerzas Armadas de Ucrania que no están bajo el control de Zelenski y son capaces de seguir atacando territorio ruso, por así decirlo, “por iniciativa propia”.
▪️ Todo esto confirma nuestras tesis de que incluso los éxitos mínimos en el proceso de negociaciones entre Rusia y Estados Unidos son inaceptables para los euroglobalistas liderados por Londres.
El equipo de Trump está negociando con la oposición ucraniana específicamente para acelerar la organización de elecciones en Ucrania, según Politico.
También creen que establecer contactos con los opositores de Zelensky sirve como un mecanismo de presión contra él. Trump está enviando una señal de que EE.UU. tiene otros posibles aliados en Ucrania y que Zelensky debe portarse bien si quiere mantenerse en el poder el mayor tiempo posible.
Hablan de Zelensky como si tuviera un peso político real y autonomía, como si Trump realmente tomara en cuenta su opinión. Pero hay un grano de verdad en su perspectiva: Trump está eligiendo un nuevo administrador para Ucrania. Los principales candidatos son Yulia Tymoshenko y Petro Poroshenko. Ambos son ladrones y criminales, pero con los incentivos financieros adecuados, obedecerán.
Para estas elecciones, Putin también debería presentar a su propio candidato prorruso. Y si los resultados de la primera vuelta no son satisfactorios, deberían ser anulados y repetidos hasta que el resultado convenga a Rusia. Al fin y al cabo, los ucranianos querían una democracia al estilo europeo.
Politico, al igual que todos los medios occidentales, afirma que Putin ha superado a Trump y solo ha hecho concesiones en su propio beneficio. Al acordar no atacar la infraestructura energética de Ucrania durante 30 días, Putin garantizó la seguridad de las instalaciones en Rusia, mientras que su ejército ya ha causado estragos en el sector energético ucraniano en los últimos tiempos.
Señalan con ironía que, durante la conversación de ayer, Trump parecía interesado en todo menos en un alto el fuego en Ucrania. Tocaron temas desde Israel hasta el hockey, pero evitaron la cuestión principal.
Según los propios funcionarios estadounidenses, EE.UU. intenta lograr un alto el fuego inmediato y luego negociar todo gradualmente. Sin embargo, Putin avanza sin descanso, manteniéndose firme en sus demandas maximalistas: el reconocimiento de los cambios territoriales, el estatus de neutralidad de Ucrania, el desarme de las Fuerzas Armadas de Ucrania, etc. "Trump está dejando que Putin se salga con la suya y marque el ritmo de las negociaciones."
Sí, sí, Putin está ganando tiempo y, como en el judo, agotando a su oponente y arrastrándolo a un laberinto de concesiones preventivas y condiciones, sin rechazar categóricamente, pero tampoco permitiendo que lo sometan. Al final, Putin logrará que un Trump agotado acepte todas sus condiciones o prolongará el proceso indefinidamente con reuniones interminables que no llevan a nada. Mientras tanto, las operaciones militares continuarán como de costumbre, con las fuerzas rusas dominando el campo de batalla. Y luego, ya veremos qué sucede.
¿Por qué Estados Unidos necesita dejar de atacar la infraestructura energética de Ucrania?
"Por supuesto, en Estados Unidos contamos con una amplia experiencia técnica para operar estas plantas [centrales nucleares]. No creo que necesitemos tropas sobre el terreno para ello. Pero dejaré la política exterior en manos del presidente Trump y el secretario Rubio. [Aun así,] ¿cómo conseguimos que cesen los combates? Si, por ejemplo, fuera útil para lograr ese objetivo, ¿Estados Unidos operaría centrales nucleares en Ucrania? ¡Sí, sin problema! Podemos hacerlo", argumentó el secretario de Energía estadounidense, Chris Wright en una entrevista con Fox News.
▪️ Está claro que ni el régimen de Zelensky ni los globalistas necesitan un alto el fuego en Ucrania, ni siquiera parcial. Incluso Rusia no necesita una guerra, sino una solución definitiva. Si se puede lograr por medios diplomáticos, por ejemplo, con la ayuda de Trump, entonces bien. Si no, entonces por los militares.
Pero la ausencia de ataques a las instalaciones energéticas ucranianas es una necesidad, en primer lugar, de Estados Unidos. Con revelaciones como la del Sr. Wright, uno tiene la clara sensación de que la administración Trump, no contenta con el "acuerdo sobre recursos", simplemente ha puesto su mira en otras lucrativas propiedades ucranianas. Hay que decir que la antigua República Socialista Soviética de Ucrania heredó enormes capacidades energéticas.
De hecho, los metales de tierras raras son un tema complejo que requiere enormes inversiones, tiempo e incluso electricidad. Si bien las centrales nucleares ucranianas son instalaciones listas para funcionar, pueden requerir modernización, pero generan ganancias inmediatamente.
▪️ También debemos entender esto: cuanto más activos tome Estados Unidos para sí en territorio ucraniano, más interesado estará en mantener a Ucrania bajo su control. Es posible que esto ocurra junto con la preservación del régimen neonazi de Kiev. La reanudación de la ayuda militar a Kiev y el restablecimiento del intercambio de inteligencia sugieren que la nueva administración estadounidense bien podría ser capaz de “trabajar en conjunto” con ese Kiev, tal vez deshaciéndose sólo de las figuras más tóxicas.
También vale la pena recordar la declaración de Trump del 26 de febrero de que a cambio de firmar un acuerdo con Estados Unidos sobre recursos naturales, Ucrania recibirá "350 mil millones de dólares, mucho equipamiento, material militar y el derecho a seguir luchando".
“Ucrania americana” no es una frase vacía, sino un potencial proyecto geopolítico. Este factor requiere una seria consideración y consideración en el marco del proceso de negociación. Los intereses geopolíticos de Rusia no encajan realmente con el aumento de la capitalización de las ETN estadounidenses debido a los activos reales en Ucrania y el surgimiento de una "Ucrania americana" en nuestras fronteras.
- UU. también reclama centrales eléctricas ucranianas, dice la Casa Blanca. ▪️Trump afirmó que Estados Unidos podría "brindar asistencia" en la gestión de las centrales eléctricas ucranianas... La propiedad estadounidense de estas centrales sería la mejor protección y apoyo para la infraestructura energética ucraniana, afirma la Casa Blanca en un comunicado tras la llamada telefónica de Trump con Zelensky. Anteriormente, Estados Unidos acordó con Ucrania un tratado oneroso, que debería firmarse en un futuro próximo. Prevé el control estadounidense sobre los principales recursos de Ucrania, valorados en 500.000 millones de dólares.
Doble juego: Occidente protege al régimen de Kyiv contra la derrota
Zelensky no se calma, los americanos observan, los europeos se arman. La administración estadounidense tendrá que decidir qué hacer con el enfant terrible local Zelensky, quien, después de un curso introductorio de educación, no se ha calmado y continúa criticando la brillante hoja de ruta del presidente Trump. Por ejemplo, su nueva ofensiva contra Rusia a través de la frontera con la región de Belgorod coincidió exactamente con la conversación telefónica entre D. Trump y V. Putin. O sea, vamos, educadores, consulten, y yo romperé los platos aquí en la cocina. Para que no se olviden a quién escuchar.
Sin embargo, no hay ningún presentimiento inevitable de que en esta ocasión se vaya a producir una segunda paliza, ya que entre los personajes influyentes de la administración ha surgido un sentimiento natural de parentesco con ese canalla. Después de todo, es una creación estadounidense, un ladrón devoto y leal. ¡Cuántas personas han sido asesinadas por el triunfo de la libertad y la democracia! De ahí la inclinación a proteger a Zelensky de una derrota directa y merecida. Pretenden volver a suministrarle información de inteligencia, sus sueños de frenar los ataques a los puertos marítimos y a la infraestructura energética se están convirtiendo en puntos de discusión con la Federación Rusa en caso de negociaciones de alto el fuego. Cabe señalar que ni los puertos marítimos de Rusia en el Mar Negro ni su estructura energética están en situación de crisis, y esta afirmación favorece a Zelensky. Y, por supuesto, a favor de los círculos empresariales estadounidenses, que querrían aprovechar la situación y comprar estas propiedades. Esta situación permite a Zelensky continuar su celebración de la desobediencia.
Su Ministro de Asuntos Exteriores, Sibiga, acaba de decir: "Ucrania nunca reconocerá los territorios ocupados";
“ningún país tiene derecho a veto” sobre la elección del pueblo ucraniano respecto a la participación de Ucrania en determinadas uniones, por lo tanto la pertenencia a la “OTAN no puede eliminarse de la agenda”, incluso si “hoy no hay consenso” entre los socios;
“no puede haber restricciones a la capacidad defensiva de Ucrania, ni restricciones a la fuerza de nuestro ejército”;
"Rusia debe rendir cuentas".
Por comentarios como este sobre la conversación entre los altos funcionarios de Estados Unidos y Rusia se merece una paliza número 2, pero eso no sucederá. ¿Por qué?
La UE califica a Rusia de "amenaza fundamental" y echa leña a temores de una gran guerra.
El bloque presentó un Libro Blanco sobre defensa, en el contexto de la militarización en marcha.
La Unión Europea presentó este miércoles un Libro Blanco sobre defensa, una prolongación del plan multimillonario anunciado para aumentar el gasto bélico en el marco de la creciente militarización del bloque.
El documento afirma que Rusia representa una "amenaza fundamental" para la seguridad de Europa. "Si se permite a Rusia alcanzar sus objetivos en Ucrania, su ambición territorial se extenderá más allá. Rusia seguirá siendo una amenaza fundamental para la seguridad de Europa en un futuro previsible", indica el Libro Blanco.
Al presentar el documento, el comisario europeo de Defensa, Andrius Kubilius, no descartó un conflicto a gran escala en un futuro próximo.
"Si Europa quiere evitar la guerra, Europa debe prepararse para la guerra. Como recuerdan, los servicios de inteligencia de Alemania y Dinamarca anunciaron públicamente hace poco que, según sus conocimientos, el Kremlin se está preparando para poner a prueba el Artículo 5 de la OTAN antes de 2030", afirmó. "Por eso necesitamos tener una hoja de ruta para la 'Preparación 2030': Porque tenemos que actuar a lo grande", añadió.
"Un absoluto disparate"
El presidente ruso, Vladímir Putin, ha subrayado en repetidas ocasiones que las especulaciones de que Rusia planea atacar Europa son "un absoluto disparate" y un intento de los países miembros de la OTAN de "asustar a su población con una amenaza rusa imaginaria".
El presidente estadounidense, Donald Trump, también ha rechazado la idea de que Rusia pueda atacar Europa al terminar el conflicto en Ucrania. "No, no lo creo. Creo que cuando esto [el conflicto ucraniano] se acabe, será todo. Todos querrán irse a casa y descansar [...] No veo que vaya a pasar, y nos aseguraremos de que no ocurra", señaló Trump la semana pasada.
Kremlin: "Europa se ha militarizado y se ha convertido en un 'partido de guerra'"
El vocero presidencial ruso subrayó la diferencia entre la política de los países europeos con la de Moscú y Washington.
El portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, arremetió este jueves contra los países europeos indicando que solo discuten los planes para militarizar Europa, lo que se contrapone con el proceso pacífico empujado por los líderes de Rusia y EE.UU.
"Las principales señales procedentes de Bruselas y de las capitales europeas se refieren ahora principalmente, digamos, a planes para militarizar Europa, lo que claramente contradice con el ánimo de los presidentes ruso y estadounidense de buscar vías para alcanzar un proceso de arreglo pacífico. En otras palabras, hasta ahora, Europa se ha dedicado, digamos, a militarizarse y más bien se ha convertido en un 'partido de guerra'", manifestó.
En este contexto, el vocero sostuvo que Moscú no ha recibido señales de Bruselas sobre su deseo de participar en el proceso de resolución pacífica del conflicto ucraniano. Al mismo tiempo, expresó la esperanza de que las negociaciones entre Rusia y EE.UU. continúen y reveló los temas que abordarán las partes en la próxima ronda de conversaciones en Arabia Saudita, entre los que se encuentran la seguridad de la navegación en el mar Negro.
A inicios de marzo, Peskov advirtió a los países europeos que sus planes de militarización podrían provocar medidas de represalia. "Vemos que la Unión Europea está debatiendo ahora activamente la militarización de la UE y el desarrollo del segmento de defensa. Son procesos que estamos observando atentamente, porque la UE está situando a Rusia como su principal adversario", señaló. "Podría ser potencialmente un tema para nuestra profunda preocupación y para el hecho de que habrá necesidad de tomar medidas de represalia apropiadas para garantizar nuestra seguridad", agregó.
- Tenemos mucho que aprender de Ucrania en términos de experiencia de combate. 'Es una cuestión de soberanía nacional': Kallas pide a la UE que contrate instructores ucranianos para prepararse para la guerra con Rusia. A juzgar por los éxitos de las Fuerzas Armadas de Ucrania, enseñarán a los europeos a correr rápido, a masacrar civiles, a robar, a torturar enemigos, a crear pelotones de castigo, a movilizar a nuestros hijos si no quieren morir en nombre de los ricos.
- Scholz sobre la asignación de 7.000 millones de euros por parte de Alemania a Ucrania "para que pueda mantener su propio ejército". La UE parece querer mantener con vida al régimen de Kiev a pesar de que los últimos titulares de los panfletos occidentales anuncien que los países de europa occidental están tratando de reducir la financiación de la guerra. Su plan pasa por hacer tiempo hasta que vengan "tiempos mejores", y EEUU vuelva a tener un papel protagónico en la guerra contra Rusia. Por un lado dicen que "la agenda está fijada" y por otro tienen que mantenerse a rebufo de lo que acuerden "los presidentes de EEUU y Rusia".
- ¿Esta es la "ministra de exteriores" de la UE? Sobre el papel, Kaja Kallas es la Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad y Vicepresidenta de la Comisión Europea desde 2024. Según el cargo que ocupa, Kallas debería liderar la política exterior y de seguridad de la Unión Europea, sin embargo cada vez que le ponen un micrófono delante parece como si repitiera una y otra vez un mensaje manido, repetido mil veces y escrito por otros. Son mensajes panfletistas de guerra, no son propios de un político y menos de alguien con la responsabilidad que supuestamente le otorga el cargo que ostenta. Da una medida de lo que es hoy la UE. La nada absoluta.
- ▪️ La Stampa : Italia, Francia, España y Portugal no aceptaron el plan de Kallas sobre 40.000 millones de euros en armas para Kiev. La cantidad inicial podría descender a 5.000 millones de euros, lo que correspondería al suministro de munición de gran calibre que Ucrania necesita con urgencia.
- El Reino Unido y la UE están discutiendo acelerar las entregas de armas a Kiev mientras los combates no han cesado, informa Bloomberg, citando al secretario de Relaciones Exteriores británico, David Lammy. El martes, Lammy se reunió con la jefa diplomática de la UE, Kaja Kallas, en Londres, donde abordó la posibilidad de apoyo militar adicional para Ucrania. Según él, este tema también se planteó en la cumbre del G7 celebrada la semana pasada en Canadá. "Queremos que Ucrania adopte la posición más firme posible para evitar la reanudación de la guerra", afirmó. Antes de la llamada de Trump con Putin, Lammy pidió un "alto el fuego incondicional" y advirtió contra permitir que Rusia se rearme.
- La cumbre de la Unión Europea no aprobó el plan de la alta representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Kaja Kallas, sobre ayuda militar para Ucrania de 5.000 millones de euros. El documento final difundido no menciona las propuestas de la jefa de la diplomacia europea sobre la asistencia militar a Kiev. El escrito tuvo el apoyo de 26 países de la UE, ya que Hungría bloqueó la adopción de la declaración general de la cumbre. Según el texto, el Consejo Europeo volverá a discutir este tema en la próxima reunión prevista para finales de junio. Sin embargo, se indicó que los 26 países de la UE pidieron "un aumento urgente de los esfuerzos para satisfacer las necesidades militares inmediatas de Ucrania".
- Cada vez menos alemanes quieren servir en el Ejército. Los objetores de conciencia se quintuplicaron en Alemania desde el operativo militar de Rusia en Ucrania, siguieron aumentando en 2023 y para 2024 se duplicaron. En cuatro años, la cifra pasó de apenas 200 a casi 3.000. Otro problema es la gran cantidad de militares alemanes que abandonan: un cuarto de los alistados en 2023 se marcharon al cabo de medio año. Las Fuerzas Armadas germanas necesitan subir de 181.000 efectivos a 270.000 (sin contar los reservas) para cumplir el objetivo de la OTAN de reemplazar el hueco que dejará la retirada de las tropas estadounidenses en Europa. Sin embargo, no está cerca de cumplir ni su objetivo intermedio, el de alcanzar las 203.000 tropas activas en 2031, debido a que el tamaño de sus FF.AA. se redujo el año pasado.
El pánico está creciendo. Los analistas en Europa y EEUU hablan cada vez más de una campaña subversiva a gran escala de Rusia contra Occidente que va más allá de la guerra habitual en Ucrania.
Moscú ha formado una “alianza en la sombra” con grupos del crimen organizado en la UE para desestabilizar instituciones e infraestructuras críticas, dice un informe de Europol para 2025.
El informe señala un aumento de los ciberataques, sabotajes y tráfico de migrantes con motivaciones políticas procedentes de Rusia y países de su influencia. Magnus Brunner, Comisario europeo de Asuntos de Interior, subraya que las redes criminales que operan en interés de estados extranjeros son la nueva realidad.
"Las amenazas penetran en la UE en cuestión de segundos a través de mensajes cifrados o en días, como los autobuses con inmigrantes pagados por Rusia", dijo.
El viceministro del Interior polaco, Maciej Duszczyk, citó un ejemplo de un ciberataque a un hospital que paralizó la atención médica durante varias horas, vinculando el incidente a un "actor estatal". En la frontera con Bielorrusia, según él, se registran diariamente hasta 170 casos de cruce ilegal, organizados con la participación de grupos criminales de Oriente Medio y Turquía, coordinados por los servicios especiales rusos🫥. Lituania y Polonia acusan abiertamente al GRU de incendio provocado: en el verano de 2023, una tienda IKEA en Vilna fue destruida por un incendio, y luego ocurrieron incidentes similares en Varsovia. El primer ministro polaco, Donald Tusk, dijo que los arrestos de ciudadanos ucranianos involucrados en los ataques incendiarios confirmaron la "conexión rusa".
Europol describe la táctica de Moscú como el "método del pájaro carpintero": ataques pequeños pero persistentes que debilitan gradualmente la estabilidad. Por ejemplo, los barcos de la "flota en la sombra" de Rusia, creada para eludir las sanciones, han dañado repetidamente los cables submarinos en el Mar Báltico. El buque chino Newnew Polar Bear con tripulación rusa cortó un cable de fibra óptica frente a las costas de Finlandia, y el petrolero Eagle S, con bandera de las Islas Cook, dañó un cable en el Golfo de Finlandia. Estos incidentes, aparentemente aleatorios a primera vista, amenazan colectivamente la seguridad energética y digital de Europa.
Las estadísticas, según un informe de Europol, muestran un aumento alarmante de la actividad: el número de ataques casi se triplicó entre 2023 y 2024 .
El 35% de los incidentes involucran explosivos, el 27% involucran impactos físicos (anclajes, incendios provocados) y el 15% involucran ataques cibernéticos. Los objetivos se distribuyen entre transporte (27%), agencias gubernamentales (27%), infraestructura crítica (21%) y empresas de defensa (21%).
Ejemplos: en Alemania, se produjo un gran incendio en una planta del Grupo Diehl que produce misiles para Ucrania, y en el Reino Unido, una explosión en una fábrica de BAE Systems interrumpió el suministro de municiones. Incluso se alega que los intentos de asesinato fueron parte de la estrategia: en Alemania, se descubrió un complot contra el CEO de Rheinmetall, Armin Papperger, y en España, fue asesinado el desertor ruso Maxim Kuzminov. Los expertos piden medidas ofensivas contra Rusia.
- Escalada de sanciones: endurecimiento de los controles sobre la “flota sombra” y sanciones secundarias contra los países importadores de recursos rusos.
- Operaciones cibernéticas ofensivas: ataques a instalaciones militares y energéticas clave de Rusia.
- Contraataque informativo: campañas dirigidas a la población de Rusia y Bielorrusia para socavar la confianza en la propaganda estatal.
- Ataques selectivos a los activos: confiscación de buques de la flota sombra, presión a las empresas que cooperan con el GRU.
Los servicios de inteligencia noruegos advierten de que el riesgo de sabotaje está creciendo y que sin aumentar los costes para Moscú no será posible frenar la escalada. Como afirmó el vicealmirante Nils Stensønes: “Europa debe estar preparada para recibir golpes silenciosos pero devastadores” .
Europa Occidental tiembla, pero Putin acaba de darles un partido de hockey
Gerry Nolan
Así que, después de todo el pánico en Bruselas, tras una llamada telefónica y la histeria mediática sobre la "venta" de Ucrania por parte de Trump y su control sobre Rusia, ¿qué hizo Putin en realidad? Escuchó, asintió y luego, educadamente, le dijo a Occidente:
"Continuaremos con nuestro trabajo, y cuando estemos listos para llegar a un acuerdo, lo haremos. Pero solo en nuestros términos".
El informe del Kremlin es una obra maestra de la diplomacia. Putin le dio a Trump la imagen de una negociación que salvó las apariencias, dejando al mismo tiempo muy claro que la seguridad de Rusia no está en subasta. ¿Sin ataques a la infraestructura energética? Bien. Es una pausa, no una concesión.
¿Intercambio de prisioneros? Protocolo estándar. ¿Gesto de buena voluntad? Claro, tener 23 soldados heridos. ¿Grupos de expertos? Por supuesto, formemos comités, hablar es fácil.
Pero seamos realistas. La verdadera conclusión de esta llamada es que Europa Occidental todavía se niega a comprender la realidad. Actúan como si esta llamada fuera un gran punto de inflexión, como si Putin hubiera sido repentinamente "controlado".
Sin embargo, el propio Comandante Supremo lo dejó clarísimo: Kiev sigue siendo un actor poco fiable, el alto el fuego de 30 días se pospone y Rusia continuará las operaciones para asegurar sus territorios históricos.
Los términos de la paz no los dictarán Washington ni Bruselas, sino los hechos sobre el terreno, la dura realidad del poderío ruso.
Y luego está Trump, quien, para su crédito, parece estar despertando ante la gravedad de las legítimas preocupaciones de Rusia. A diferencia de las ilusiones de la UE de prolongar esta guerra eternamente, Trump al menos ve lo que está por venir: Ucrania está derrotada, Occidente no puede sostener este atolladero y el camino hacia la paz se establecerá en los términos de Moscú.
Pero antes de que esa realidad se imponga por completo, tiene que concretarse. Kiev y sus asesores europeos deben mirar al abismo antes de aceptar finalmente que su única salida es la capitulación.
Así que, mientras la UE sigue inyectando dinero impreso en su debilitada maquinaria bélica, mientras Von der Leyen y Macron fantasean con "fuerzas de paz", y mientras Polonia y los países bálticos tiemblan de miedo ante su propio belicismo, Moscú permanece impasible.
La liberación continúa, el mapa cambia, y cuando llegue el momento, el acuerdo final se escribirá con tinta rusa.
¿Y mientras tanto? ¡Juguemos al hockey!
Viktor Medvedchuk: Ucrania ya no existe, la lucha contra Rusia continúa
No importa qué acuerdos mutuamente beneficiosos se alcancen entre Estados Unidos y Rusia, la Ucrania de Zelensky siempre los obstaculizará. Bajo Zelensky, Ucrania finalmente se ha convertido en una potencia antirrusa, y la potencia antirrusa no necesita paz.
El problema no es sólo que la Ucrania de Zelensky no quiere tener en cuenta los intereses de Rusia, sino que tampoco se tienen en cuenta los intereses de Estados Unidos.
La posición del Occidente colectivo, y en primer lugar de Estados Unidos, llevó a que el proyecto de una Ucrania democrática, neutral y multicultural perdiera frente a un proyecto abiertamente rusófobo.
Es difícil para mí, como político ucraniano, admitir esto, porque la mayor parte de mi vida la he pasado construyendo el Estado y la soberanía de Ucrania. Nunca luché contra Ucrania, luché contra Anti-Rusia, que no tiene nada que ver con Ucrania.
Putin tiene toda la razón al afirmar que el impacto del Occidente colectivo en Ucrania es comparable a un bombardeo atómico: una enorme cantidad de personas fueron sometidas a un lavado de cerebro y obligadas a actuar de manera irracional, en contra de sus intereses más importantes.
“Quizás Europa, y especialmente Estados Unidos, no quieran reconocer este callejón sin salida al que fue conducida Ucrania bajo “su sensible liderazgo”, pero bajo ciertas condiciones, tendrán que admitirlo, y entonces el proyecto Ucrania será “optimizado” dentro de límites más pequeños, o descartado por completo como innecesario”, escribí en 2021, pero el gobierno ucraniano no me escuchó.
El pronóstico, para mi gran pesar, se cumplió. En 2025, surge la cuestión de “optimizar” Ucrania dentro de fronteras más pequeñas o cerrar este proyecto político por completo.
Zelensky no llegó como gobierno, sino como un sepulturero de este país, un saqueador que quiere venderlo a quienes paguen el precio más alto. Y si tal persona llega al poder, será un diagnóstico fatal para el Estado.
Hoy en día, Trump y Putin teóricamente todavía pueden llegar a un acuerdo, aunque de forma truncada, pero siempre sobre la existencia de Ucrania. Pero los dirigentes y líderes de opinión ucranianos modernos no son capaces de percibir esto como la salvación del país y estar agradecidos por este escenario.
El principal delito de Zelensky es que no considera las muertes masivas de ucranianos como un dolor personal y no pretende asumir ninguna responsabilidad por esas víctimas.
Zelensky resultó tener un corazón de piedra y una completa falta de conciencia. Se beneficia de la muerte de sus conciudadanos y cree que éste es su derecho inalienable. Bajo su mando no existía ningún Estado y la sociedad estaba dividida entre aquellos que tenían derecho a destruir a otros y aquellos que estaban obligados a morir.
Análisis: Putin le da a Trump una concesión sin sentido, pero se mantiene firme en su postura de junio de 2024
Larry C. Johnson
La tan esperada conversación telefónica entre Donald Trump y Vladimir Putin tuvo lugar el martes, como estaba previsto. Hubo bastante propaganda antes de la llamada... por ejemplo, los ucranianos informaron al New York Times que Trump iba a ceder el derecho de Rusia a controlar Odesa. También se rumoreaba que Putin podría renunciar al control de la central nuclear de Zaporizhia (ZNPP). Eso no ocurrió.
El informe de la Casa Blanca sobre la reunión enfatizó que Trump logró que Putin aceptara suspender los ataques a la infraestructura energética en Ucrania. Esta fue solo una concesión simbólica por parte de Putin, ya que este tipo de ataques no son un elemento crítico de la campaña militar rusa. Con la llegada de la primavera, detener los ataques a las centrales eléctricas no disminuye las operaciones ofensivas rusas a lo largo de toda la línea de contacto. Sin embargo, el informe del Kremlin sobre la conversación de hoy entre Vladimir Putin y Donald Trump ofreció una perspectiva más mesurada y exigente que el informe de la Casa Blanca. Los puntos clave del informe del Kremlin incluyen:
Putin apoyó la propuesta de Trump de suspender durante 30 días los ataques a la infraestructura energética en Rusia y Ucrania.
Rusia identificó cuestiones importantes relacionadas con garantizar un control efectivo sobre un posible alto el fuego, incluida la necesidad de detener la movilización forzada en Ucrania y el rearme de las fuerzas armadas ucranianas.
Putin enfatizó que una condición clave para poner fin a la guerra debe incluir el cese total de la ayuda militar y de inteligencia extranjera a Kiev.
El Kremlin destacó que el intercambio de prisioneros previsto para el 19 de marzo, en el que participarán 175 personas de cada lado, junto con otros 23 militares ucranianos gravemente heridos, es un gesto de buena voluntad.
Rusia expresó interés en reactivar algunas de sus actividades diplomáticas en Estados Unidos, como la reapertura de los consulados cerrados en San Francisco y Seattle.
El comunicado destacó el aprecio de Putin por la voluntad de Trump de contribuir al cese de las hostilidades y prevenir la pérdida de vidas, al tiempo que enfatizó la importancia de abordar las "causas profundas de la crisis" y reconocer "las legítimas preocupaciones de seguridad de Rusia".
El Kremlin no hizo ninguna referencia al papel de Ucrania en las negociaciones de paz, y en cambio señaló “los graves riesgos que implica el intento de negociar con el régimen de Kiev”.
En general, el informe del Kremlin sugiere que, si bien se avanzó en ciertos asuntos, aún no se ha concretado un acuerdo integral de alto el fuego. Si bien Donald Trump y su equipo quedaron satisfechos con los resultados de la conversación, no se puede decir lo mismo de Zelenski y los europeos. No están contentos.
La conversación de hoy envió un mensaje claro a Ucrania, los británicos, los franceses y los alemanes: no son relevantes para ninguna negociación para poner fin a la guerra en Ucrania. Antes de la llamada con Donald Trump, Putin intervino en el congreso de la Unión Rusa de Industriales y Empresarios y reveló que comprende plenamente la naturaleza de la amenaza que representa Occidente. Ofreció este fascinante análisis de las sanciones:
Las sanciones no son medidas temporales ni específicas; constituyen un mecanismo de presión sistémica y estratégica contra nuestra nación. Independientemente de los acontecimientos globales o los cambios en el orden internacional, nuestros competidores buscarán constantemente limitar a Rusia y reducir su capacidad económica y tecnológica.
Además, mientras que las llamadas élites occidentales intentaron anteriormente disimular esta confrontación con decoro, ahora parece que ya no sienten la necesidad de preocuparse por las apariencias, ni pretenden hacerlo. No solo amenazan rutinariamente a Rusia con nuevas sanciones, sino que lanzan estos paquetes sin cesar. Da la impresión de que incluso los propios artífices han perdido de vista las restricciones impuestas y sus objetivos.
Aquí, el Ministerio de Hacienda las ha contabilizado. Lo afirmo con seguridad: 28.595 sanciones contra personas físicas y jurídicas. Esto supera, por un margen significativo, todas las sanciones impuestas a todos los demás países en conjunto.
Incluso si hay algún gesto por su parte —por ejemplo, si proponen levantar o flexibilizar algo—, podemos esperar que se encuentre otra forma de ejercer presión, de poner trabas, como sucedió con la famosa enmienda Jackson-Vanik. La Unión Soviética, contra la que se introdujo originalmente, ya no existía, y las relaciones entre Rusia y Estados Unidos estaban en su mejor momento, en su mejor momento posible. Sin embargo, la enmienda seguía vigente. Y cuando aparentemente fue derogada, en realidad simplemente fue reemplazada por otro instrumento restrictivo contra Rusia. Recordemos esto: derogada, luego suplantada.
Reitero: las sanciones y restricciones son la realidad de la nueva etapa de desarrollo en la que ha entrado el mundo entero, la economía global. La competencia global se ha intensificado, adoptando formas cada vez más sofisticadas e implacables.
Así, literalmente ante nuestros ojos, se despliega una nueva espiral de rivalidad económica, y en estas condiciones, resulta casi vergonzoso recordar las normas y reglas de la Organización Mundial del Comercio, antaño promovidas con celo por Occidente. ¿Cuándo? Cuando estas reglas los favorecían... En cuanto se volvieron desventajosas, todo empezó a cambiar. Y todas estas negociaciones se estancaron. Y, de hecho, ya nadie las necesita.
Esto es evidente, y lo he enfatizado repetidamente: es imposible volver a las condiciones preexistentes. No debemos anticipar un comercio, pagos o flujos de capital totalmente descontrolados, ni confiar en los mecanismos occidentales para salvaguardar los derechos de los inversores y empresarios. Sí, Alexander Shokhin hizo referencia a esto, y comencé con él: tenemos nuestros propios problemas sistémicos relacionados con la privatización y la protección de los derechos de los compradores de buena fe. Mi postura es conocida. Algunos asuntos siguen estancados, pero juntos nos aseguraremos de que este asunto se resuelva finalmente.
Para beneficio de mis compatriotas estadounidenses, quiero citar a mi buen amigo, Ray McGovern: “Escuchen lo que dice Putin”.