Llegado el ocaso del Imperio Español, lejos de amilanarse, continuó defendiendo sus derechos al amparo del tratado de Tordesillas y prosiguió convencido de su misión y acción benéfica en sus provincias de Ultramar. Pruebas de ello las tenemos en dos ejemplos claros, por un lado las exploraciones y tomas de posesión en la costa noroeste del continente americano y en la Real Expedición Filantrópica de la Vacuna, la mayor expedición humanitaria de la Historia en palabras del viajero Humboldt y de su descubridor, el inglés Edward Jenner.
José Antonio Crespo-Francés*
Leer: España en Alaska (y VII)
* Coronel de Infantería en Reserva.