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Calexit, el comienzo de la balcanización de EEUU

Por Rodrigo
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cutuku2001hotmailcom/10/10/18
lunes 08 de abril de 2019, 21:00h

Los habitantes californianos han construido una potencia económica sustentada en varios sectores (electrónico, aviones, agricultura, telecomunicaciones, entre otros). Apoyada por el movimiento separatista Calexit, la separación del estado amenaza con romper la columna vertebral de Estados Unidos

Ulises Noyola Rodríguez

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Ulises Noyola Rodríguez

Los habitantes californianos han construido una potencia económica sustentada en varios sectores (electrónico, aviones, agricultura, telecomunicaciones, entre otros). Apoyada por el movimiento separatista Calexit, la separación del estado amenaza con romper la columna vertebral de Estados Unidos.

Cabe recordar que el estado de California representó una esperanza para los trabajadores norteamericanos a partir de la revolución de las telecomunicaciones en 1990. Las empresas tecnológicas crearon millones de empleos bien remunerados, científicos, ingenieros, programadores e investigadores, entre otros. Al mismo tiempo, los migrantes naturalizados consiguieron un trabajo con unos ingresos suficientes para satisfacer sus necesidades y poder integrarse en las comunidades. No obstante, la población no pudo incorporarse completamente en el sector tecnológico, por lo que terminó trabajando en empleos mal pagados en empresas como Wal-Mart, Starbucks y McDonald's.

Después de la posguerra, el Gobierno americano financiaba de forma significativa la educación pública de suerte que los estudiantes norteamericanos acababan exitosamente sus estudios. Ahora los estudiantes necesitan, al pagar costosas colegiaturas, endeudarse con bancos privados. Al acabar la universidad, los jóvenes adquieren una deuda colosal; con lo cual están obligados a encontrar un trabajo mal pagado rápidamente para pagar la deuda. En caso de no pagar, los intereses aumentan de forma astronómica haciendo que la deuda supere incluso un monto de 200.000 dólares. Como resultado, los estudiantes caen de forma frecuente en depresión, volviéndose proclives a consumir drogas, sufrir aislamiento y tener pocas expectativas profesionales.

La otra cara de la moneda está en las enormes ganancias de los banqueros de Wall Street que ven un mercado rentable en los millones de estudiantes que egresan de las universidades cada año. En consecuencia, los bancos privados como Wells Fargo y SallieMae expandieron la deuda estudiantil a 1,5 billones de dólares el año pasado. La deuda es una pesada carga para los estudiantes pues tardan en pagar en algunos casos hasta veinte años; con lo cual no pueden contar con un ingreso para tener un nivel de vida aceptable. Para resolver este problema, el Gobierno norteamericano necesita reestructurar la deuda estudiantil, además de incrementar el presupuesto de las universidades públicas.

Las empresas multinacionales convirtieron a California en la entidad con más pobres de Estados Unidos, ya que una cuarta parte de la población vive en condiciones de pobreza. En este escenario, los migrantes son el grupo social que sufre los estragos más amargos de la pobreza. Como prueba, los migrantes indocumentados reciben una menor remuneración laboral; son chantajeados constantemente por las empresas estadounidenses; y no tienen prestaciones laborales en sus lugares de trabajo. La reforma migratoria prometida por el presidente Barack Obama fue olvidada y rechazada por los miembros de los Partidos Demócrata y Republicano; situación que imposibilitó la regularización del estatus migratorio de la población indocumentada.

Por otro lado, la población migrante enfrenta numerosos riesgos en caso de trabajar en la agricultura. Por ejemplo, los trabajadores usan pesticidas y agroquímicos en los cultivos con poca protección, por lo que están expuestos a enfermedades cardiovasculares como diferentes tipos de cáncer. Además, los agricultores laboran durante prolongadas jornadas bajo condiciones inadecuadas en los campos donde hay contaminación de agua, elevadas temperaturas e intensas sequías, que han provocado incendios forestales.

Por si fuera poco, los trabajadores indocumentados no cuentan con un seguro médico, situándose en una posición vulnerable. Al recibir un exiguo salario, los agricultores no pueden comprar un seguro médico que cubra el gasto de consultas en consultorios privados y la compra de medicamentos. En Estados Unidos, las empresas farmacéuticas han impuesto un gran número de patentes, que han mantenido los medicamentos a un precio inaccesible. Por lo tanto, la población no puede ni siquiera comprar las medicinas necesarias para seguir un tratamiento con regularidad.

En la actualidad, los migrantes reciben un permiso para quedarse y trabajar durante dos años a través del programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia. Como es sabido, este programa cubre a una minúscula parte de la población migrante; por lo que no tienen un futuro asegurado en Estados Unidos. Al representar casi una cuarta parte de la población californiana, los migrantes darían un impulso decisivo al Calexit por la falta de una alternativa en los Partidos Republicano y Demócrata. En la siguiente década, la población descendiente de migrantes será el grupo predominante; con lo cual definirán el rumbo de California.

Por otro lado, la desregulación de los mercados financieros ha afectado las finanzas públicas de California. En la última crisis financiera, los banqueros se enriquecieron por medio de la venta masiva de hipotecas a las familias estadounidenses, quienes volvían a vender las viviendas para pagar sus deudas. Finalmente, el impago de las hipotecas por parte de los estadounidenses provocó la quiebra de bancos, el cierre de empresas y la pérdida de empleos. Como los trabajadores ya no pudieron cumplir con el pago de las hipotecas, las familias fueron desalojadas y por ende perdieron sus viviendas.

?Además el gobierno californiano se declaró, al tener un menor ingreso, en emergencia fiscal pues no podía cumplir con el pago de sus trabajadores, obligaciones financieras, entre otros compromisos. En ese entonces, el gobernador Arnold Schwarzenegger impuso un plan de austeridad que incluyó la reducción de los salarios de los funcionarios estatales, la eliminación de programas sociales y el recorte del financiamiento de servicios públicos. Además, los gobernadores han reducido los impuestos federales y locales sobre las empresas norteamericanas, que dejó aún más vacías las arcas de las finanzas públicas.

El gobierno estatal no ha financiado de forma suficiente programas sociales para satisfacer las necesidades de la población norteamericana en el otorgamiento de viviendas. Así los grandes grupos financieros compraron, endeudándose con un pago minúsculo de intereses, las casas perdidas por las familias estadounidenses. Para los empresarios, esto representó un negocio rentable ya que vendieron y rentaron las casas a un costo exorbitante. Como resultado, el número de personas que viven en las calles ha crecido de forma exponencial en los últimos años. Por este abandono, la población indigente ha aumentado el consumo de drogas, tiene enfermedades mentales y es encarcelada por la policía local.

Finalmente, el gobierno californiano se endeudó para sufragar parte del gasto público ante la merma de ingreso. El gobernador pasado, Jerry Brown, dejó la deuda pública en 1,3 billones de dólares (54% del PIB del estado) a finales de 2017. Esto afectó a los habitantes californianos ya que el aumento de la deuda provocó el impago de pensiones, beneficios sociales y la postergación de proyectos de infraestructura. Para los integrantes del Calexit, otro factor desfavorable es que el estado recibe muchos menos recursos de lo que aporta al Tesoro norteamericano, por lo que la independencia consolidará los recursos necesarios para cubrir el gasto público.

?En conclusión, el Calexit representa un movimiento que comenzaría la balcanización de Estados Unidos. La división de la sociedad norteamericana, reflejada en la xenofobia y la opulencia de varios grupos, ha impedido la formación de un movimiento de masas que puedan desafiar el orden establecido por los grandes empresarios y los banqueros de Wall Street. En caso de continuar esta tendencia, los habitantes californianos apoyarán el movimiento separatista cuyo desenlace tendrá consecuencias desastrosas para los estadounidenses.