(Alfonso Lafarga) Se lo dijo personalmente al rey Juan Carlos hace cinco años y, ahora, Zahra Ramdám Ahmed se lo pide al príncipe Felipe, inminente rey de España. Quiere que cumpla la promesa que hizo su padre en 1975 en El Aaiún, capital del Sáhara Occidental y en aquel momento la 53 provincia española: proteger los legítimos derechos del pueblo saharaui.
Zahra Ramdán, presidenta de la Asociación de Mujeres Saharauis en España (AMSE), recuerda a quien va a ser Felipe VI y jefe del Estado español, el compromiso que el príncipe Juan Carlos, como Jefe de Estado en funciones, adquirió con los saharauis el 2 de noviembre de 1975, en una circunstancias cruciales, cuando el general Franco agonizaba y la amenazante “Marcha Verde” marroquí estaba preparada para presentarse en las puertas del Sáhara Occidental.
Aquel 2 de noviembre, y en un viaje sorpresa, Juan Carlos, príncipe de España, se presentó en El Aaiún para dar su respaldo a los militares destinados en el Sáhara Occidental, ante cuyos mandos y las principales personalidades saharauis dijo que España iba a cumplir sus compromisos. Y al final, concretó: “Debemos proteger también los legítimos derechos de la población civil saharaui, ya que nuestra misión en el mundo y nuestra historia nos lo exigen”.
El 31 de marzo de 2009 Zahra Ramdám asistió como invitada por su condición de presidenta de AMSE a la entrega de la tercera edición del Premio de Derechos Humanos Rey de España en la Universidad de Alcalá, concedido al “Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer" (CLADEM), con sede en Perú y que recogió su presidenta, Morma Henríquez.
En el Paraninfo de la Universidad de Alcalá Zahra Ramdám, junto al resto de invitados, escuchó con atención al rey de España decir que los premios habían sido concebidos para “defender la dignidad de la persona, expresada en Derechos y Libertades que no prescriben, universales, iguales e inalienables” con el fin de “fomentar la tutela y promoción de los Derechos Humanos, básicos para articular conceptos de tanto alcance como la libertad, la solidaridad, la justicia o la ciudadanía”.
“Conceptos y derechos –añadió el rey- del todo imprescindibles para configurar el marco político, jurídico y social que el ser humano requiere para poder desarrollarse en plenitud”.
Finalizado el acto, los reyes, el Defensor del Pueblo en ese momento, Enrique Múgica Herzog y el Rector de la Universidad de Alcalá, Virgilio Zapatero, cuyos organismos patrocinan el premio, abandonaron la mesa presidencial mientras conversaban con los asistentes, representantes del Gobierno, partidos políticos, universidad, mundo de la cultura y la cooperación.
Zahra Ramdám, vestida con melfa, la tradicional prenda de las mujeres saharauis, se acercó decidida hasta el rey y se presentó: “Majestad, soy saharaui y recuerdo perfectamente cuando visitó mi ciudad natal, El Aaiún, en noviembre de 1975”. Y continuó: “S.M. prometió que iba a defender el legítimo derecho del pueblo saharaui. Sin embargo, el pueblo saharaui aún está esperando que esa promesa se cumpla, todavía estamos sufriendo las consecuencias de esa promesa que no se ha llevado a cabo”. Zahra recuerda que el rey escuchó y calló.
Ahora, la presidenta de la Asociación de Mujeres Saharauis en España cuenta a “elespiadigital.com” que quiere plantear a quien va a ser Felipe VI lo mismo que dijo a su padre. “Y mucho más a él -resalta- como un primer monarca licenciado, formado, que entiende más de legalidad internacional. Que el pueblo saharaui lleva más de 22 años esperando poder ejercer su derecho a votar, como establecen las instancias internacionales, como ha dicho Naciones Unidas, para decidir si quiere ser parte de Marruecos o ser libre”.
Zahra Ramdám, que huyó a los campamentos de refugiados de Tinduf (Argelia) cuando iba a ser detenida, reclama al que va a ser Jefe del Estado español su intervención personal para ayudar a la solución de un conflicto que dura ya 39 años.
“A Felipe VI le pido –afirma- que intervenga, por sus estrechas relaciones con la monarquía marroquí y, por supuesto, con Francia, país que obstaculiza una solución. Esperamos que el nuevo monarca asuma su responsabilidad, estamos en el siglo XXI y el pueblo saharaui sigue sufriendo las lacras de la retirada de España del Sáhara, de esa violación fragrante del Derecho Internacional “.
La representante de las mujeres saharauis considera que la monarquía española tiene una deuda con los saharauis y es el momento de saldarla con Felipe VI como Jefe del Estado. Y añade lo que califica como un caso más de la discriminación que sufren los saharauis: “Le están dando la nacionalidad española a los sefardíes de hace más de 500 años y de los saharauis, que eran también ciudadanos españoles, se han olvidado por el chantaje marroquí”.