Hungría no participará en el Festival de Eurovisión 2020, que el próximo año se celebra en Rotterdam, al considerarlo un certamen "demasiado gay".
La MTMA, la televisión pública húngara, no ha explicado las razones de la retirada de forma oficial. Sin embargo, The Guardian apunta que la razón se debe a que la competición es "demasiado gay". El medio británico recoge declaraciones de los trabajadores de la cadena, que interpretan que la decisión está relacionada con el aperturismo y tolerancia a la cultura LGTBI del certamen.
Las mismas fuentes señalan que la retirada de Hungría del festival no ha sido una sorpresa ya que la televisión estatal no ofrece una cobertura positiva relacionada con los derechos del colectivo. La única excepción es la celebración del Día del Orgullo Gay en la capital.
Por su parte, András Bencsik, comentarista de un canal de televisión progubernamental, se ha referido al festival como "una flotilla homosexual" y ha dicho que no participar beneficia la salud mental de Hungría.
La decisión de Hungria de retirarse del concurso llega en un momento de ascenso del discurso homófobo en el país, gobernado por el ultraderechista Viktor Orbán. En los últimos meses, un parlamentario del partido de Orbán pidió el boicot a Coca-Cola tras una campaña publicitaria con fotografías de una pareja gay. Así mismo, el presidente del parlamento húngaro ha comparado a los defensores del matrimonio igualitario con los pedófilos.
Facebook e Instagram bloquean a usuarios con contenido demasiado 'picante'
La lucha contra la obscenidad y los acosos se intensifica en el mundo virtual. No ha pasado ni un mes desde que Facebook iniciara una guerra no declarada contra el uso de emoticones en contextos obscenos, cuando llegan noticias desde otro frente: Instagram está eliminando las publicaciones y cuentas de usuarios por ser demasiado reveladoras.
Como es bien conocido, cualquier red social que permita subir y compartir imágenes es una tierra fértil para aquellas jóvenes que aparentemente sienten mucho calor ante las cámaras y no dudan en quitarse un par de prendas antes de tomarse y publicar sus fotos.
Sus cuentas florecen más rápido de lo normal ante la calurosa mirada de sus seguidores y los miles de me gusta que nutren su creciente popularidad y las estimulan a seguir compartiendo lo que en vida real podría ser reprochable.
Pero ahora, una nube oscura se ha interpuesto entre ellas y sus fans.
Las amantes de las publicaciones picantes tendrán que estar muy atentas no solo a cómo posar mejor ante sus seguidores, sino también a las limitaciones que deben cumplir para que los frutos logrados no sean cortados a raíz por los fervientes seguidores de la moral de Facebook.
?Facebook contra las 'frutas y vegetales'
Las nuevas reglas son parte de los nuevos estándares comunitarios de las plataformas sociales. De acuerdo con las recientes pautas de Facebook e Instagram (pertenece a la primera), los emojis no se pueden usar para sugerir actividad sexual, ni para cubrir partes del cuerpo desnudas. Los pezones y la desnudez ya están prohibidos en estas redes, por lo que a menudo las personas se cubren juguetonamente con un emoji.
Pero, ahora, si alguien se atreviera a combinar en estas plataformas una carnosa berenjena con un jugoso durazno y unas cuantas gotas de agua cayendo entre ellos, los administradores podrían considerarlo acoso o insinuación sexual inapropiada y censurar la publicación. Como (de seguro) todos sabemos, el emoji de berenjena se ha utilizado para representar un pene, un durazno puede ser un trasero y el agua goteando una referencia a la eyaculación.
Si se descubre que has usado emojis o incluso una inofensiva foto en un contexto sexual, tu publicación podría ser eliminada. Si sucede repetidamente, puede resultar en que toda tu cuenta sea desactivada.
?"También restringimos el lenguaje sexualmente explícito que puede conducir a una solicitud, porque algunas audiencias dentro de nuestra comunidad global pueden ser sensibles a este tipo de contenido y puede impedir que las personas se conecten con sus amigos y la comunidad en general".
Durante el segundo y tercer trimestre de 2019, Facebook eliminó 58 millones de publicaciones que contenían desnudos y actividad sexual de adultos y 5,7 millones de publicaciones con acoso y hostigamiento.
El descontento entre las trabajadoras de sexo las llevó incluso a protestas en frenbte de la casa matriz de Instagram en Londres.
Daños colaterales
El cambio está dirigido principalmente a las trabajadoras sexuales, que ya no podrán vender sus servicios tanto en Facebook como en Instagram. Pero otros usuarios también han sentido los efectos de la prohibición, incluso si solo son emojis como parte de una broma sobre o cuando se habla de sexo.
No es sorpresa que tal iniciativa encontrase una feroz resistencia entre los usuarios comunes de Instagram y Facebook, sobre todo entre las chicas con cuentas muy ilustrativas y textos demasiado instructivos. Y es que en muchos casos su popularidad y bienestar personal es inversamente proporcional a la cantidad de ropa que lleven puestas en sus fotos publicadas.
La bailarina de poste y activista contra la censura de la desnudez Carolina Hades (Bloggeronpole) comenzó toda una campaña bajo el hashtag #EveryBODYVisible, después de que Instagram tomara medidas contra las etiquetas de pole dance. Los hashtags como #poledancing y #femalefitness arrojaron cero resultados en la búsqueda. La plataforma luego se disculpó y cambió su política, pero aún bloquea o restringe las etiquetas que podrían usarse para compartir contenido en violación de las pautas.
Una marca de moda retira un modelo por su parecido con el uniforme de los campos de concentración nazi
La marca de moda de lujo española Loewe ha retirado uno de sus modelos tras las críticas que suscitó por su parecido con el uniforme de los prisioneros de los campos de concentración nazi, tras su lanzamiento el pasado 14 de noviembre.
El pasado viernes la cuenta de Instagram sobre moda Diet Prada dio su opinión sobre la prenda. "No se puede ver nada más que uniformes de campos de concentración en este conjunto de 1.840 dólares", reza la publicación que acompaña la foto del producto.
La prenda se anunciaba como "Chaqueta de trabajo a rayas blanco/negro", y se vendía a 950 dólares, según informa New York Post. Formaba parte de la nueva colección cápsula de William De Morgan, cuyos productos se venden hasta por más de 5.000 dólares.
La compañía ya se ha disculpado en una de sus historias de Instagram y ha retirado el producto de su sitio web. "Nunca fue nuestra intención y pedimos disculpas a aquellos que hayan podido pensar que somos insensibles con la sagrada memoria", ha declarado.