Patrisse Cullors, confundadora del movimiento Black Lives Matters ha admitido haber utilizado la mansión de 6 millones de dólares situada en Los Ángeles (EE.UU.) para fines personales hasta en dos ocasiones en una entrevista con The Associated Press
La primera vez fue para brindar por la toma de posesión de Joe Biden y Kamala Harris, como presidente y vicepresidenta del país en enero de 2021, mientras la segunda fue para celebrar la fiesta de cumpleaños de su hijo en edad escolar. La activista admitió haber cometido errores y haber tomado decisiones lamentables que no han ayudado con la confianza en el movimiento.
Anteriormente, Cullors negó rotundamente a través de Twitter haberse alojado en la propiedad, o haberla usado para su propio beneficio personal.
En octubre de 2020, el movimiento compró la mansión con dinero en efectivo en el sur de California con fondos de las donaciones.
El inmueble fue comprado en secreto por Dyane Pascall, un desarrollador inmobiliario local vinculado a Black Lives Matter Global Network Foundation. Días después, se transfirió a una sociedad de responsabilidad limitada de Delaware controlada por la fundación por 5,8 millones de dólares, según muestran los registros citados por New York Magazine.
Se trata de un inmueble de lujo con seis dormitorios, una piscina, un estudio de sonido, varias chimeneas y un estacionamiento con capacidad para más de 20 automóviles, cuya transacción no fue informada a los demás miembros de la organización.
Internamente conocido como 'Campus', el inmueble se compró "con la intención de que sirviera como espacio de alojamiento y estudio para los destinatarios de la beca Black Joy Creators Fellowship", creada para brindar a los creadores de contenido negros la posibilidad de trabajar en un ambiente creativo por la lucha de las desigualdades raciales, afirmó Shalomyah Bowers, miembro de la junta directiva, en un email al medio estadounidense.
La noticia de la transacción desencadenó una tormenta de críticas sobre las prácticas financieras de los directivos de la fundación, que han sido cuestionadas en numerosas ocasiones los últimos meses.
El Templo Satánico se compromete a proteger el "acceso al aborto religioso" de sus miembros en EE.UU.
El Templo Satánico (TST, por sus siglas en inglés) ha declarado en su sitio web su compromiso a proteger el "acceso al aborto religioso" de sus miembros en aquellos estados de EE.UU. que "prohíben el aborto pero otorgan excepciones para casos de incesto y violación".
Según esta organización religiosa no teísta dedicada al activismo político y cultural, los estados que prohíben el aborto y no otorgan excepciones "presentan desafíos más significativos", pero el Templo Stánico tiene "una serie de planes" para superar ese problema.
"Primero, demandaremos a la FDA [Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU.] para permitir el acceso del TST a la mifepristona y el misoprostol [medicamentos que interrumpen el embarazo] para su uso bajo supervisión médica como parte de nuestro ritual de aborto religioso", se declara en el comunicado.
La organización introdujo el llamado "Ritual del Aborto Satánico" para abogar por una excepción religiosa bajo la Ley de Restauración de la Libertad Religiosa de 1993. El argumento del Templo Satánico es que, si se considera al aborto como un ritual religioso, el Gobierno no podría intervenir legalmente ni cargar a los pacientes con requisitos previos.
Las recientes declaraciones del TST llegan poco después de que se filtrara un borrador de opinión del Tribunal Supremo de EE.UU. que sugería que la Corte podría estar dispuesta a anular la histórica decisión del caso Roe contra Wade de 1973, que ha garantizado el derecho al aborto en el país durante casi medio siglo.
Si esto llegara a ocurrir, el aborto sería ilegal de forma inmediata en al menos 13 estados.