Se diría que los demócratas son incapaces de competir sin hacer trampas. O que la eventualidad de un regreso de Trump a la Casa Blanca aterroriza al establishment al extremo de que toda maniobra para evitarlo estaría justificada.
Ya hablamos de que Trump entró en el debate de la ultrademócrata cadena ABC como el profeta Daniel en el foso de los leones, y que todo estaba minuciosamente preparado para que el expresidente no pudiera ganar. Pero lo que se plantea ahora va más allá de un entorno sesgado a la bolivariana.
Mark Penn, exasesor senior de Bill y Hillary Clinton, ha solicitado en una tribuna publicada en el Wall Street Journal que la cadena ABC inicie una investigación interna formal sobre la planificación y ejecución del debate presidencial de esta semana por parte de su división de noticias para determinar si hubo algún intento de «manipular el resultado de este debate».
Penn sugiere, como han hecho en las últimas horas hasta cinco informantes anónimos, que el equipo de Kamala Harris supuestamente recibió notificación previa de las preguntas del debate. También se ha publicado que un presunto informante de ABC podría publicar pronto una declaración jurada alegando que la campaña de Harris recibió preguntas de muestra y que los moderadores recibieron instrucciones de comprobar los hechos de Trump, pero no de Harris.
«Voy a hacer pública una declaración jurada de un denunciante de ABC en relación con el debate», denuncia Penn. «Acabo de firmar un acuerdo de confidencialidad con el abogado del denunciante», añade.
La declaración jurada se firmó el 9 de septiembre, el día anterior al debate.
La declaración jurada afirma que la campaña de Harris recibió preguntas de muestra que eran esencialmente las mismas que se formularon durante el debate, y garantías separadas de que se verificarían los datos que diera Donald Trump, pero en ningún caso los de la propia Harris.
«En consecuencia, la declaración jurada establece varios otros factores que se incluyeron en el debate para dar a Kamala una ventaja significativa. He visto y leído la declaración jurada y después de que el abogado borre el nombre del denunciante y otra información personal del denunciante, voy a publicar la declaración jurada completa. Haré pública la declaración jurada antes de que acabe el fin de semana», concluye Penn.
Por desgracia, horas después la congresista Marjorie Taylor Green escribió que el empleado de ABC que afirmó que se había enviado una lista de preguntas de muestra a Kamala Harris antes del debate murió en un accidente de coche.
¿Casualidad? Mucha casualidad…
