Pepe Escobar
A menos de un mes de la crucial cumbre anual de los BRICS, que se celebrará en Kazán bajo presidencia rusa, en Moscú y otras capitales euroasiáticas se está debatiendo con conocimiento de causa lo que debería ponerse sobre la mesa en el frente de la desdolarización y los sistemas de pago alternativos.
A principios de este mes, Andrey Mikhailishin, jefe del grupo de trabajo sobre servicios financieros del Consejo Empresarial de los BRICS, detalló la lista de los principales proyectos que se están estudiando. Entre ellos figuran:
- Una unidad de cuenta común - como en La Unidad, cuyos contornos fueron revelados por primera vez en exclusiva por Sputnik.
- Una plataforma para liquidaciones y pagos multilaterales en divisas digitales de los BRICS, que conecte los mercados financieros de los miembros de los BRICS: eso es BRICS Bridge, que guarda similitudes con el Banco de Pagos Internacionales MBridge,ya en vigor. Esto complementará los sistemas intrabancarios ya en funcionamiento, como el SPFS de Rusia y el CPAM de Irán, que liquidan las transacciones financieras -y el 60% de su comercio- en sus propias monedas.
- Un sistema de pago basado en blockchain que elude por completo el dólar estadounidense: BRICS Pay. Podría decirse que 159 participantes están preparados para adoptar este mecanismo similar al SWIFT que evita las sanciones.
- Un depósito de liquidación (Clear).
- Un sistema de seguros.
- Y, sobre todo, una agencia de calificación de los BRICS, independiente de los gigantes occidentales.
Lo que está en juego es el diseño extremadamente complejo de un sistema financiero completamente nuevo, descentralizado y que utiliza tecnología digital. BRICS Clear, por ejemplo, utilizará blockchain para registrar valores e intercambiarlos.
En cuanto a The Unit, el valor de la unidad de cuenta común está vinculado en un 40% al oro y en un 60% a una cesta de
monedas nacionales de los miembros del BRICS. El Consejo Empresarial de los BRICS considera que La Unidad es un instrumento
«conveniente y universal», ya que una unidad puede convertirse en cualquier moneda nacional.
¿A quién llamo para hablar con el BRICS?
Hice una pregunta muy directa a dos analistas rusos, uno de ellos ejecutivo de tecnología financiera con amplia experiencia en toda Europa, y el otro director de un fondo de inversión de alcance mundial. Dada la sensibilidad de sus cargos, prefieren permanecer en el anonimato.
La cuestión: ¿Está preparado el BRICS para convertirse en actor en Kazán el mes que viene, y qué debería haber sobre la mesa en cuanto a la estrategia para establecer un sistema de pagos alternativo?
Las respuestas. Analista 1:
«Ha llegado el momento de que el BRICS se convierta en un actor real. El mundo lo exige. Los líderes de los países BRICS lo entienden claramente. Tienen el poder moral y la voluntad política para crear una organización que proporcione un número para que el BRICS sea llamado - esa es la mejor pregunta para la próxima cumbre.»
El analista se refiere a lo que podría denominarse «el momento Kissinger», cuando el Dr. K bromeó célebremente, en la época de la Guerra Fría, «cuando quiero hablar con Europa, ¿a quién llamo?».
Pasemos ahora al Analista 2:
«Para que un acuerdo BRICS entre países signifique algo, los países necesitan acordar un marco de acción y eso significa aceptar algunas responsabilidades a cambio de ciertos derechos. Y parece que no hay mejor manera de lograrlo que llegar a obligaciones mutuamente acordadas sobre la liquidación de transacciones financieras.»
Uno de los analistas añadió un punto muy importante y concreto: «A estas alturas la situación está bastante clara, para abordar adecuadamente la cuestión de los pagos transfronterizos. El mejor mecanismo debería basarse en el Nuevo Banco de Desarrollo (NBD o NDB, New Developement Bank), dado que Rusia tiene el mandato de proponer al nuevo presidente de esa organización. Sea quien sea el candidato, los pagos transfronterizos deberían ocupar un lugar prioritario en su agenda».
El NBD es el banco de los BRICS, con sede en Shanghai. El analista espera que la decisión sobre el futuro del NBD se tome antes de la cumbre de los BRICS: «Dadas las consideraciones diplomáticas y políticas, el candidato debería darse a conocer, formal o informalmente a los países miembros.»
El nuevo sistema de pagos blockchain de los BRICS cambiará las reglas del juego en medio de la «imparable» desdolarización - experto
La decisión de Moscú de crear un nuevo sistema de pagos BRICS basado en blockchain es un desarrollo que «cambiará las reglas del juego» para el mundo multipolar, Christopher Douglas Emms, jefe de la...
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Tal y como están las cosas, la comidilla en
los círculos informados de Moscú esque Alexey Mohzin, director ejecutivo del FMI para Rusia, tiene un 60% de posibilidades de ser nombrado miembro del NBD . Paralelamente, Ksenia Yudaeva, antigua sherpa del G20 y ex adjunta de Elvira Nabiullina, del Banco Central de Rusia, podría convertirse en la nueva representante ante el FMI.
Así pues, podría producirse una remodelación del NBD/FMI en el frente ruso. La atención debería centrarse en el potencial de futuros cambios productivos, más que en las oportunidades perdidas; las políticas del NBD hasta ahora no han sido precisamente revolucionarias, teniendo en cuenta que los estatutos del banco están vinculados al dólar estadounidense.
El nuevo acuerdo podría situar al NBD como palanca para una reforma del FMI, más que como una alternativa a éste.
El
«momento Kissinger» desempeña un papel clave en esta ecuación. Pondrá de relieve que, hasta que el momento se convierta en realidad, el NBD debería ser el único actor de cambios efectivos en asuntos cruciales como la estabilidad de la
infraestructura financiera.
Y desde esa perspectiva, como señala uno de los analistas, «La UNIDAD y todos los demás proyectos similares pueden presentarse como herramientas complementarias de gestión de riesgos que cubren contra las políticas monetarias imprudentes y los riesgos de la Crisis Financiera Mundial-2».
Pero el tiempo apremia. El Presidente Putin se reunió recientemente con la Unión Rusa de Industriales. Éstos han enviado una carta a la Administración y al Banco Central ruso en la que exponen las
ideas que consideran
más prometedoras.
La Unidad es una de ellas. El gobierno del Primer Ministro Mishustin está ahora en la fase final de decidir qué proyectos apoyar: para la cumbre de los BRICS en Kazán, y una semana antes, para la cumbre anual del Consejo Empresarial de los BRICS en Moscú.
¿Un Bretton Woods BRICS?
Planteé la misma pregunta sobre los BRICS a los analistas rusos y también al indispensable Prof. Michael Hudson, quien en realidad ofreció una crítica concisa y en profundidad de lo que podría estar sobre la mesa, al tiempo que ofrecía una solución diferente.
Para el Prof. Hudson, «hay que crear una nueva institución: un Banco Central facultado para emitir créditos destinados a financiar los déficits comerciales y de pagos de algunos países, con un DEG [Derechos Especiales de Giro] artificial de tipo bancor».
El profesor Hudson argumenta que «esto sería diferente (cursiva suya) de un sistema de cámara de compensación para los bancos existentes. Sería un FMI de los BRICS. Su crédito bancors o balance sólo sería para los asentamientos entre los gobiernos, no una moneda comercializada en general. De hecho, hacer que el bancor se negocie de forma generalizada como vehículo especulativo (como es el UNIT) introduciría una gran inestabilidad y no tendría nada que ver con el necesario balance de transferencias bancarias.»
Un NBD reformado, posiblemente el año que viene bajo una nueva
presidencia rusa, debería tener todo lo necesario para convertirse en un
«FMI de los BRICS».
El profesor Hudson añade que «para tener éxito, la conferencia de Kazán debería ser un Bretton Woods de los BRICS en toda regla». Quizá sea demasiado pronto para presentar un hecho consumado. Tal vez sería un lugar para lanzar un conjunto de alternativas - incluyendo lo que pasaría por 'no hacer nada' y seguir con el actual sistema del FMI. El hecho de que el FMI acabe de cancelar su viaje para analizar la economía rusa puede ser un catalizador».
De hecho, el profesor Hudson se refiere directamente al Director Ejecutivo para Rusia, Alexey Mohzin, quien confirmó que el FMI debería haber acudido a Rusia para celebrar consultas, parte de su revisión anual de la
economía rusa, pero lo canceló por
«falta de preparación técnica».
Todo esto nos lleva una vez más al «momento Kissinger»; no está claro si Kazán dará con un «número BRICS» al que cualquiera pueda llamar.
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El profesor Hudson hace una última observación esencial sobre la deuda en dólares del Sur Global: subraya que «cómo manejar el actual exceso de deudas en dólares de los miembros del BRICS» es un problema importante.
Lo que está claro es que «el banco de los BRICS [el NBD] no debería financiar los déficits de los países miembros por esos pagos. En la práctica, tendría que haber una moratoria sobre tales pagos - en vista del actual armamentismo de las finanzas occidentales».
El profesor Hudson recuerda el capítulo de su libro Super Imperialism «sobre cómo Estados Unidos actuó contra Gran Bretaña en 1944 para conseguir un acuerdo que luego presentó como un hecho consumado favorable a Estados Unidos en Europa». El libro «repasa todos los argumentos que tuvieron lugar allí».
El profesor Hudson desearía formar parte del nuevo proceso en curso. Imagínese si el BRICS+ lo consigue: obtener un
acuerdo aprobado por la Mayoría Global sobre un nuevo sistema financiero equitativo y justo que luego se presente a la
superpotencia endeudada en 35 billones de dólares como un hecho consumado.