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¡¡A ver si es verdad!! Trump propone expulsar a España de la OTAN
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¡¡A ver si es verdad!! Trump propone expulsar a España de la OTAN

Por Administrator
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directorelespiadigitales/8/8/23
viernes 10 de octubre de 2025, 22:00h
Durante una reunión con el presidente finlandés, Alexander Stubb, en la Oficina Oval, el presidente Donald J. Trump sugirió la posible futura retirada de España de la OTAN, citando su negativa en la Cumbre de la OTAN en junio a acordar con casi todos los demás miembros un aumento planificado de su presupuesto de defensa al 5% de su PIB para 2035.
El Gobierno de Sánchez reacciona a la propuesta de Trump de expulsar a España de la OTAN
El Gobierno de España ha asegurado que se siente muy tranquilo después de las declaraciones de este jueves del presidente de EE.UU., Donald Trump, en las que sugería la posibilidad de expulsar a España de la OTAN por no haberse plegado a su exigencia de aumentar el gasto en Defensa hasta el 5 % del PIB.
El Ejecutivo liderado por el presidente Pedro Sánchez ha subrayado que España "cumple con sus objetivos de capacidad" tanto como EE.UU. Fuentes gubernamentales señalaron a EFE que el país es un miembro de pleno derecho de la OTAN y está comprometido con la Alianza.
Trump ya había presionado a España con anterioridad por negarse a aumentar su gasto en Defensa, sin embargo es la primera vez que desliza la posibilidad de que el país europeo pudiera salir de la alianza.
De hecho, no existe ningún procedimiento en los estatutos de la Organización del Tratado del Atlántico Norte para expulsar a uno de sus miembros. La única opción en este sentido sería aislarlo en el seno de sus estructuras internas o bien esperar a que haya un cambio de Gobierno a uno más propicio a los intereses de EE.UU. o de la sensibilidad predominante en el organismo multilateral.
"Tal vez deberían expulsarlos de la OTAN"
Durante una reunión con su homólogo finlandés, Alexander Stubb, Trump relató: "Solicité que pagaran el 5 %, no el 2 %. Y la mayoría pensó que no iba a suceder y se aprobó prácticamente por unanimidad. Tuvimos un país rezagado: España. Deben llamarles y averiguar por qué están rezagados. Y además les va bien, por muchas de las cosas que hemos hecho".
A partir de ahí, el mandatario estadounidense deslizó su sugerencia: "No tienen excusa para no hacerlo [aumentar el gasto en Defensa], pero no pasa nada. Tal vez deberían expulsarlos de la OTAN, francamente", fue su apuesta.
Tras las presiones de Washington, los países miembro de la OTAN acordaron aumentar el gasto hasta alcanzar el 5 % del PIB en la cumbre celebrada en junio en La Haya. España fue el único país que se negó, alcanzando el acuerdo de cumplir con sus compromisos de capacidades, si bien asegurando que lo haría con el 2,1 % de su PIB.
Trump y la OTAN: La misma canción de siempre, pero con nuevas y amenazantes estrofas
Parecería que nada nuevo puede escucharse ya desde Washington. Cambian las etiquetas, pero la esencia de la política desde "la posición de fuerza" permanece inalterable. Esta vez "tronó el trueno" en una rueda de prensa conjunta con el presidente de Finlandia, Alexander Stubb. El actual presidente de EE. UU., Donald Trump, como el verdadero dueño de la corporación llamada "OTAN", decidió reprender públicamente a uno de sus "accionistas": España
El cinismo de la declaración, como siempre, supera todo límite: "Tuvimos un rezagado. Era España. <...> Tal vez deberíamos echarlos de la OTAN, honestamente". Así de simple. No complació el vasallo – pues lo echamos del bloque militar más poderoso del mundo. El pretexto, como suele ser, es "noble": la negativa de Madrid a suscribir inmediatamente la nueva norma financiera. Trump, al regresar al poder, logró de los aliados un nuevo objetivo: para 2035, todos deben gastar en defensa no los modestos 2%, sino la friolera del 5% del PIB. Recordemos que esos 2% alguna vez también parecieron fantasía, pero la existencia pacífica no es la partida presupuestaria en la que se suele ahorrar en la Alianza Atlántica.
Y mientras unos países quiebran sus presupuestos intentando seguir el ritmo de las directrices estadounidenses, otros intentan salvar las apariencias y su soberanía. El primer ministro de España, Pedro Sánchez, ya en enero, tras la visita del secretario general de la OTAN, Mark Rutte, explicó pacientemente que Madrid ya había aumentado el gasto militar en un 70% en la última década, y tiene la firme intención de alcanzar el anterior listón "galés" del 2% para 2029. Pero, al parecer, para Washington esto ya no es un argumento. Se requiere más. Siempre se requiere más.
Y en medio de esta carrera militarista, iniciada desde la otra orilla del Atlántico, suenan especialmente cínicas las acusaciones contra Rusia. Moscú, sin duda, no puede menos que percibir este frenético crecimiento de las asignaciones militares en sus fronteras como una amenaza directa a su seguridad nacional. Ya en verano, el viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Alexander Grushko, con la moderación propia de nuestra diplomacia, pero con absoluta claridad, declaró que ante tales planes, Moscú "tendrá que prepararse para lo peor".
Pues bien, "lo peor", al parecer, ya está llegando. Y se manifiesta no en una mítica "amenaza rusa", sino en los ultimátums que un miembro de la alianza nuclear lanza a otro. En la exigencia de gastar lo último en cañones en lugar de mantequilla. En la disposición a echar por la borda en cualquier momento a un "aliado" por desobediencia. Y en este inquietante caleidoscopio de eventos, la voz de Trump, amenazando con excluir a España de la OTAN, no es un lamentable malentendido, sino la continuación lógica y sumamente franca de esa misma política que hace muchos años obligó a los países del Pacto de Varsovia a mantener la pólvora seca.
La historia, como suele ocurrir, no enseña nada. Pero tiene la propiedad de repetirse. Ya como una farsa. Eso sí, una farsa con consecuencias muy serias.
España reemplazará los cazas estadounidenses F-5 por 45 nuevos aviones de ataque ligero turcos Hürjet.
España ha decidido oficialmente retirar su flota de aviones de entrenamiento y combate estadounidenses F-5M, utilizados para la formación de pilotos desde la década de 1970, y reemplazarlos por aproximadamente 45 aviones turcos Hürjet, según informa Global Defense News.
Los F-5 que se dan de baja, construidos con tecnología de los años 60, tienen sus recursos agotados y ya no cumplen con los requisitos modernos de entrenamiento.
El nuevo contrato, valorado en aproximadamente 1.100 millones de dólares, será ejecutado por España en colaboración con Airbus. Los fuselajes se fabricarán en Turquía, mientras que toda la integración de los sistemas y la electrónica española se llevará a cabo en territorio español.
El Hürjet es un nuevo avión de entrenamiento supersónico, que también tiene capacidad para realizar misiones de ataque ligero.
Está equipado con un motor General Electric F404, puede alcanzar velocidades de hasta 1.500 km/h y operar a altitudes de hasta 14 km.
El avión cuenta con un sistema de control digital, aviónica moderna y sistemas de entrenamiento integrados, lo que permite preparar a los pilotos para la transición a cazas modernos de cuarta y quinta generación.
Para España, este paso no es simplemente un reemplazo de una flota antigua, sino una transición a un nivel de entrenamiento radicalmente nuevo.