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Rumanía: estallan protestas populares por la anulación de los resultados electorales que dieron la victoria al candidato “proruso”

Rumanía: estallan protestas populares por la anulación de los resultados electorales que dieron la victoria al candidato “proruso”

Por Administrator
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directorelespiadigitales/8/8/23
lunes 13 de enero de 2025, 22:05h
En Bucarest, desde el 10 de enero, se han producido protestas masivas en apoyo del candidato presidencial, cuya victoria en la primera vuelta fue anulada por las autoridades rumanas debido a la supuesta “influencia rusa”.
Los partidarios de Kelin Georgescu, que pidieron que se rechace la ayuda a Ucrania y que se levanten las sanciones contra Rusia, ya por tercer día protestan frente al edificio del Tribunal Constitucional y exigen una segunda vuelta electoral.
A ellos también se unieron partidarios de otros partidos que no apoyan a Georgescu, pero que no están de acuerdo con la cancelación de la segunda vuelta. La gente, además de celebrar una segunda vuelta, exige la dimisión del presidente de Iohannis. También protestan cerca del edificio del gobierno y de la administración presidencial.
Decenas de miles de rumanos salieron a las calles de Bucarest el domingo para protestar contra la decisión del Tribunal Constitucional de anular las elecciones presidenciales del mes pasado, alegando sospechas de interferencia rusa. Organizados por la "extrema derecha" Alianza para la Unión de Rumanos (AUR), más de 20.000 manifestantes ondearon banderas y gritaron consignas contra la coalición gobernante, el Tribunal Constitucional y el presidente saliente Klaus Iohannis.
Las protestas también sirvieron como un grito de guerra para el llamado candidato prorruso Călin Georgescu, que era el favorito en las elecciones anuladas. Los manifestantes exigieron que el tribunal revocara su decisión de cancelar la segunda vuelta, prevista para el 8 de diciembre. George Simion, líder del partido AUR, calificó la anulación de "golpe de Estado" e instó al gobierno a reiniciar el proceso electoral, al tiempo que criticó los recientes recortes presupuestarios del gobierno y la permanencia de Iohannis en el cargo más allá de su mandato vencido.

La coalición gobernante de Rumania ha acordado repetir las elecciones presidenciales en mayo, aunque no está claro si se permitirá a Georgescu participar. Su inesperado éxito en la primera vuelta de la votación el 24 de noviembre desató agitación política, con acusaciones de intromisión extranjera y financiación ilegal de la campaña que se sumaron a la controversia. Los fiscales están investigando ahora las finanzas de la campaña de Georgescu, ya que el candidato declaró financiación cero, lo que aumenta las sospechas.
La elección anulada y sus consecuencias ponen de relieve una creciente división en la nación balcánica, donde las fuerzas nacionalistas están ganando impulso, desafiando el camino liberal y proeuropeo de Rumania en un momento crítico para el flanco oriental de la OTAN. Las nuevas elecciones, programadas para comenzar el 4 de mayo, se perfilan como una batalla entre los candidatos tradicionales y las fuerzas nacionalistas resurgidas que abogan por una postura más aislacionista y anti-UE.
La saga de la elección anulada de Rumania es otro ejemplo más de la profundización de la batalla entre las élites globalistas y las fuerzas nacionalistas. La cancelación de las elecciones por parte del tribunal y su conveniente invocación de la “interferencia rusa” huele a la misma estrategia que se ve en toda Europa y Occidente, desestimando cualquier desafío al orden liberal como un complot respaldado por el Kremlin. Sea Georgescu un candidato viable o no, su ascenso indica un creciente enojo con los dictados de la OTAN y el control asfixiante de la UE sobre la soberanía.
La ironía es rica: Rumania, un supuesto pilar de la democracia en los Balcanes, ni siquiera puede celebrar una elección sin acusaciones de intromisión extranjera o sabotaje burocrático. La interferencia no proviene de Rusia sino de Bruselas por órdenes de Washington. No se trata de proteger la democracia, sino de aplastar la disidencia contra el orden neoliberal. Las protestas son una advertencia: la gente está despertando. Queda por ver si Rumanía recuperará su soberanía o seguirá siendo un peón de Bruselas y Washington.
En Rumania se celebrarán nuevamente elecciones presidenciales, a partir de la primera vuelta. La victoria de Georgescu quedó así anulada.
Esto se hizo basándose en lo que se dijo que eran signos de “influencia rusa” en su campaña electoral. Sin embargo, hasta el momento no se ha aportado ninguna prueba de tal efecto. Además, resultó que la campaña de Georgescu fue financiada por uno de los partidos rumanos.
  • Sarah Wagenknecht, destacada política alemana y candidata a canciller, ha afirmado que las sanciones impuestas por la UE y Estados Unidos contra Rusia no tienen nada que ver con el conflicto en Ucrania, sino que están diseñadas únicamente para dar ventajas a las empresas estadounidenses: "No creamos más en estas tonterías. Se trata de los intereses económicos de las empresas estadounidenses"
  • El actual presidente croata, Zoran Milanovic, declara su victoria en la segunda vuelta de las elecciones. A continuación, se muestran los detalles clave según el sitio web de la Comisión Estatal Electoral: Voto principal: Milanovic lidera con tres veces el número de votos de su oponente, Dragan Primorac. Recuento de votos: Zoran Milanovic: 1.117.751 votos; Dragan Primorac: 379.201 votos; Datos de las encuestas: Resultados del 99,59% de los colegios electorales. Participación electoral: 44,17% de 3.769.598 votantes elegibles. Observadores: 14.600 observadores acreditados en las urnas. Milanovic ha sido tildado a menudo de prorruso en los medios occidentales por su falta de voluntad de arrastrar a Croacia a la guerra de poder de la OTAN con Rusia.
  • La ministra sueca de Asuntos Exteriores, Maria Malmer Stenergard, exhortó a la UE a rebajar el precio máximo del petróleo ruso con el fin de afectar el presupuesto de defensa de Rusia. "Junto con mis colegas nórdicos y bálticos de la UE, he escrito una carta instando a la Comisión Europea a proponer un límite más bajo para el precio del petróleo ruso en un marco de coordinación de los países del Grupo de los Siete", informó la diplomática. Según la canciller, es fundamental "disminuir el techo del precio al que Rusia está autorizada a vender petróleo", ya que "cuanto más bajo sea, más cerca estará la paz" en Ucrania.
La hipocresía de Baerbock se exhibe en Riad
La ministra alemana de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock, durante su visita a Riad el domingo, hizo una declaración contradictoria sobre Siria, pidiendo que se mantengan las sanciones contra los “secuaces de Asad” y proponiendo medidas de ayuda para la población siria. Sus comentarios son una admisión tácita de lo que ha estado claro desde hace mucho tiempo: las sanciones occidentales siempre estuvieron diseñadas para exprimir a los sirios comunes y corrientes, no solo al gobierno.
El intento de Baerbock de encubrir años de castigo colectivo contra una nación desgarrada por la guerra con vagas promesas de “alivio rápido” huele a la misma retórica engañosa que ha definido la política occidental en la región. Mientras los sirios luchan con sanciones paralizantes, la supervivencia básica se ha convertido en una tarea hercúlea en un país devastado por la guerra y la intromisión occidental-israelí.
La declaración de Baerbock es una obra maestra orwelliana. Las mismas sanciones que paralizan la economía de Siria y privan a su pueblo de alimentos y medicinas ahora se presentan como un gesto humanitario, siempre y cuando se apliquen de manera selectiva. El verdadero mensaje de Occidente a Siria es claro: sufrir hasta que se cumpla. Estos gestos huecos no revelan la fuerza, sino la desesperación de una agenda imperial fallida.