Zoltán Tiroler
Intereses transversales, centros de pensamiento interconectados, vínculos familiares y de amistad se encuentran detrás del escandaloso Premio Nobel de la Paz otorgado a la defensora del genocidio y perpetradora de violencia María Corina Machado.
Entre otros, la plataforma de periodismo de datos La Tabla revela una red de contactos institucionales y personales en Noruega y Venezuela que conecta a Machado con miembros del Comité Nobel y “think tanks” reaccionarios.
Únase a nosotros en un viaje impresionante entre políticos, oligarcas y reaccionarios traicioneros cuyo destino era un premio de la paz para un belicista.
(Después de la publicación de este artículo, recibimos el siguiente comentario de SILC (el Centro Liberal Internacional Sueco de los Liberales) y Martin Angeby de SILC: "Estoy un poco decepcionado de que no mencionen a SILC. Conozco tanto a Barth Eide como a Halvorsen y Machado.")
En el testamento de Alfred Nobel de 1895, podemos leer que el propósito del premio es recompensar a “la persona que haya realizado la mayor o mejor labor para promover la paz entre las naciones, para la abolición o reducción de los ejércitos permanentes y para celebrar y promover congresos de paz”. La galardonada de este año, la sionista y golpista María Corina Machado, tiene tan poco que ver con el testamento de Nobel como un pez con el Sahara.
Empecemos con la nominación: ¿Adivinan quién la nominó al Premio Nobel de la Paz? Pues nada menos que Marco Rubio, el actual Secretario de Estado de Estados Unidos, un belicista. Entre los firmantes también se encuentran los infames cubanos de Miami que construyeron sus carreras y fortunas sobre el odio a todo lo progresista, como María Elvira Salazar, Carlos Giménez y Mario Díaz-Balart. Estos, y otros halcones de la administración, enviaron una carta al Comité Noruego del Nobel el 24 de agosto de 2024 con la nominación. Primero destacan su propio compromiso con los derechos humanos y luego a Machado por su valentía, coraje moral y altruismo. «Su liderazgo es esencial para movilizar el apoyo nacional e internacional a una solución pacífica». Es un «faro de esperanza y resistencia». «Ella y el movimiento que ha creado contrastan marcadamente con la dictadura de Maduro y sus partidarios en todo el mundo, que han contribuido a reprimir, oprimir y empobrecer al pueblo venezolano». Y así sucesivamente... En su nominación de Machado, el Comité Nobel ha copiado en gran medida la justificación de la falsa nominación de Rubio y compañía.
El plazo de nominación expiró el 31 de enero de 2025, y Trump apenas había tenido tiempo de asumir el cargo y comenzar su desapacible campaña para recibir el premio. Así que, ¿qué mejor para los belicistas estadounidenses que su fiel cómplice y amiga de Trump, María Corina Machado? Quien, por cierto, dedicó su premio a Trump, "por su decidido apoyo". En relación con el premio, la traidora Machado también dijo: "Ahora, más que nunca, contamos con el presidente Trump". Y escribió: "En cuanto liberemos a Venezuela, nuestro país se convertirá en el aliado más importante de Estados Unidos en la región". Trump, por su parte, enfatizó su apoyo incondicional al galardonado. Entre otros amigos cercanos de Machado se encuentran Javier Milei en Argentina, Jair Bolsonaro en Brasil y el líder del partido ultraderechista Vox de España, Santiago Abascal. Tampoco debemos olvidar a su amigo Netanyahu, a quien le pidió que llevara a cabo una intervención militar en Venezuela junto con Estados Unidos.
Con la nominación, el Premio de la Paz da luz verde a un ataque urgente y amenazante de Estados Unidos contra Venezuela para apoderarse de los vastos recursos naturales del país. La propia Machado lo incita y afirma confiar en Estados Unidos. Tampoco tiene intención de venir a Oslo hasta que Venezuela sea "libre". Para suavizar los llamados de Trump a una invasión, ha prometido que el petróleo y otros recursos naturales de Venezuela serán privatizados y que Estados Unidos recibirá condiciones especialmente favorables.
No sorprende que la Fundación Nacional para la Democracia (NED), financiada por Estados Unidos, se encuentre entre quienes felicitaron a Machado (junto, por ejemplo, con el ministro de Asuntos Exteriores de Suecia). La NED es una organización no gubernamental (ONG) de Estados Unidos cuyo objetivo declarado es promover la democracia en todo el mundo y contrarrestar la influencia comunista en el extranjero mediante el fomento de instituciones políticas y económicas, como grupos políticos, grupos empresariales, sindicatos y el libre mercado.
El ministro de Asuntos Exteriores de Noruega, Espen Barth Eide, ha ejercido una activa labor de cabildeo. Ha realizado una larga campaña contra la República Bolivariana de Venezuela. Su implicación en los planes de desestabilización de Estados Unidos queda demostrada, por ejemplo, por su referencia a un informe estadounidense aún no publicado.
El Comité Noruego del Nobel, designado por el Storting, está compuesto por cinco personas: Jørgen Watne Frydnes, Asle Toje, Anne Enger, Kristin Clemet y Gry Larsen. El conservador Asle Toje es conocido por su entusiasmo por el "acuerdo transatlántico", la OTAN y la UE. Participa activamente en Oikos, un centro de estudios afiliado al SD. Más adelante, abordaremos algunos de los otros.
Otra figura clave detrás del premio es el noruego-venezolano Thor Halvorsen Mendoza, egresado de la Universidad de Pensilvania y fundador del Foro de la Libertad de Oslo (OFF). OFF financia proyectos en Venezuela en apoyo a la oposición. El abuelo de Thor Halvorsen fue cónsul noruego en Venezuela y posteriormente director de General Motors en el país. Su abuelo materno fue ministro en Venezuela. Su padre también fue un alto funcionario en Venezuela, pero terminó sus días en Miami. En 2024, María Corina Machado fue una de las ponentes de la conferencia anual de OFF. Halvorsen ha sido criticado por invitar a golpistas de Honduras y Venezuela a OFF.
Otra de las cinco miembros del comité Nobel, Kristin Clemet, colabora institucionalmente con el Foro de la Libertad de Oslo de Halvorsen a través de su think tank Civita. Civita participa en la gestión de OFF, financiado con millones de dólares de impuestos. El think tank ha establecido estrechos contactos con la extrema derecha latinoamericana, en particular con el director de OFF, Thor Halvorsen Mendoza, y su "Fundación de Derechos Humanos", financiada por Estados Unidos. Kristin Clemet ha defendido a OFF de las críticas en el sitio web de Civita. Bajo el título "Campaña contra el Foro de la Libertad de Oslo", defendió al foro y los describió como "defensores de la libertad y los derechos humanos que han sido perseguidos por sus creencias". Clemet ha participado activamente en campañas contra Venezuela y en 2024 publicó un artículo muy crítico contra el gobierno venezolano.
Thor Halvorsen Mendoza es primo del líder opositor venezolano y golpista Leopoldo López, quien, junto con Machado, ha sido el principal actor internacional de la oposición. Tanto López como Halvorsen Mendoza y Machado pertenecen a la oligarquía y a la clase alta absoluta de Venezuela. López es el dueño de la gran empresa Polar, que saboteó el suministro de alimentos del país para perjudicar al gobierno (y a los venezolanos pobres).
López fue uno de los golpistas contra Hugo Chávez en 2002, junto con Machado. López era alcalde en ese momento y tenía el control de una fuerza policial que arrestó a varios funcionarios del gobierno en relación con el breve golpe, incluyendo al fiscal general del país. Machado, a quien el comité elogia por "mantener viva la llama de la democracia" y por su lucha por una "transición pacífica de la dictadura a la democracia", ha sido aliada política de López, con quien coordinó las violentas protestas en Venezuela de 2014 y 2017, las guarimbas, que se cobraron cientos de vidas.
Thor Halvorsen Mendoza también fundó la Fundación de Derechos Humanos (HRF), además de OFF. Esta organización, a su vez, tiene vínculos institucionales con el think tank "liberal" Civita (Kristin Clemet). López ha participado en eventos relacionados con Civita, que, por lo tanto, ha alineado intereses y está vinculada al Foro de la Libertad de Oslo y a la oposición venezolana.
La cadena de conexiones se completa con la fundación Fritt Ord, que financió y otorgó el premio a Kristin Clemet en 2017 y también es donante de OFF. La misma fundación otorgó el premio a Jørgen Watne Frydnes, actual presidente del Comité Noruego del Nobel, en 2021.
Aquí, pues, se establece una red que conecta al laureado con el comité noruego de toma de decisiones a través de actores institucionales, amistades y vínculos familiares con la oposición venezolana. Poco a poco, se va revelando la estructura del corrupto Comité Noruego del Nobel, del que ahora también se sospecha que existen filtraciones. Fue entonces cuando las inesperadas posibilidades de Machado se dispararon en una casa de apuestas antes del anuncio.
En su imaginación más salvaje, o en sus peores pesadillas, Alfred Nobel probablemente no podría imaginar a una "ganadora del premio de la paz" como la dama de clase alta manchada de sangre.
El autor e historiador indio-estadounidense Vijay Prashad, radicado en Chile, señala: “La decisión demuestra que el Comité Nobel es tan vasallo de la élite estadounidense como los líderes de la OTAN”.
PS Se ha presentado una denuncia contra la Fundación Nobel por violar el testamento de Alfred Nobel y por posible uso político del Premio de la Paz 2025
