Se pasaron aquellos tiempos en que las COPs eran grandes acontecimientos de los que las televisiones y medios informaban todos los días en que tenían lugar. Ahora lo que hacen es no informar del tremendo fracaso que ha sido la COP30 para que la gente no advierta que el edificio climático se resquebraja.
La COP30 ha sido un fracaso de asistencia cuando ni siquiera Pedro Sánchez ha ido. Ha provocado un incidente diplomático entre Alemania y Brasil cuando el canciller alemán criticó la situación económica y social de Brasil y de Belém, una ciudad donde el 60% de la población vive en chabolas (favelas), y fue insultado por autoridades brasileñas.
Pero sobre todo la COP30 ha sido un fracaso en cuanto a acuerdos y consecuencias.
Los combustibles fósiles no figuran en el acuerdo final porque los países petroleros, envalentonados por la postura de EEUU, se han negado a ello. Han decidido que no van a seguir el juego de aceptar que son mercaderes de la causa de ‟la destrucción del planeta”.
El acuerdo de triplicar la financiación para la adaptación climática para 2035 es un acuerdo vacío porque no dice quién va a poner ese dinero, por lo que no lo va a poner nadie.
El resto de los acuerdos son menores o de postureo. La adopción de un mecanismo para la transición justa como el que tiene la UE para favorecer a los trabajadores e indígenas en el reparto de fondos. La adopción de 59 indicadores para evaluar el progreso en la adaptación climática. Y un plan de política de género.
Lo más curioso ha sido que tras 30 años, un grupo de 12 países entre los que se encuentra España han firmado una iniciativa global sobre la integridad de la información sobre el cambio climático. Es un compromiso para abordar con medidas políticas, económicas y legales el problema del «negacionismo climático».
Si tras 30 años de control absoluto del mensaje y de los medios ahora sienten la necesidad de combatir a quienes propagan el mensaje contrario, eso solo quiere decir una cosa:
Ellos están perdiendo la batalla de la información y nosotros la estamos ganando.
ASOMBROSO ENFRIAMIENTO DEL OCÉANO
Desde el año pasado, el océano se ha enfriado tanto que ahora está más frío que en 2021, el año de la erupción de Hunga Tonga. Y no se debe a que haya condiciones de La Niña en el Pacífico, porque 2021 fue un año de La Niña. Si los modelos climáticos no pueden explicar el calentamiento de 2023-24 (
https://www.nature.com/), como
dijo el director del Instituto Goddard de Estudios Espaciales de la NASA, Gavin Schmidt, mucho menos pueden explicar este abrupto enfriamiento, para el que no hay una causa clara a menos que uno acepte que la naturaleza domina el cambio climático.
Científicos españoles alertan de que las energías renovables ya están amenazando al águila imperial
Un estudio científico alerta de la superposición entre parques eólicos y solares y las zonas clave de cría y dispersión del águila imperial ibérica, una de las rapaces más amenazadas de Europa.
La transición energética avanza a gran velocidad en la península ibérica. Impulsada por los objetivos europeos de neutralidad climática, la instalación de infraestructuras eólicas y fotovoltaicas se ha multiplicado en los últimos años. Sin embargo, esa expansión acelerada podría estar comprometiendo el hábitat de una de las especies más emblemáticas y vulnerables del continente: el águila imperial ibérica (Aquila adalberti).
Un equipo del
Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC), junto con la
Fundación CBD-Hábitat y varias universidades españolas, ha analizado cómo las nuevas zonas energéticas coinciden con áreas de reproducción y dispersión de esta rapaz. Los resultados, publicados en la revista
Biological Conservation, confirman que el avance de las energías renovables amenaza de forma directa el espacio vital del águila.
La especie, en recuperación pero aún en peligro
El águila imperial ibérica, endémica de la península, está catalogada como “En Peligro” en España y “En Peligro Crítico” en Portugal. Aunque sus poblaciones se han recuperado en los últimos años —con 841 parejas censadas en 2022—, la especie sigue enfrentándose a amenazas persistentes. Entre ellas, la electrocución en tendidos eléctricos y la pérdida de hábitat derivada de la expansión humana.
Para el estudio, los investigadores analizaron los movimientos de 61 ejemplares juveniles monitorizados mediante GPS entre 2017 y 2023, junto con datos oficiales de zonas de cría. Las conclusiones son preocupantes: el 40% del área de dispersión juvenil del águila imperial en España se encuentra hoy en zonas de riesgo moderado o alto por la presencia de infraestructuras energéticas. En esas áreas se concentra más del 46% de los aerogeneradores y el 67% de la superficie fotovoltaica analizada.
Durante el seguimiento, más de un tercio de las águilas monitorizadas murieron, y en casi seis de cada diez casos el fallecimiento estuvo relacionado con instalaciones de transporte o producción de energía, principalmente por electrocución.
Planificación energética con enfoque ecológico
Los autores advierten que las actuales “zonas de aceleración” creadas por la UE, que flexibilizan los requisitos ambientales para agilizar proyectos renovables, podrían agravar la presión sobre especies sensibles. Según el estudio, solo el 21,3% del área de dispersión juvenil y el 38% de las zonas de cría del águila imperial están actualmente protegidas por las exclusiones recogidas en la Directiva (UE) 2023/2413.
El investigador Roberto Sánchez-Mateos señala en el trabajo que «las políticas de descarbonización deben integrar criterios ecológicos a pequeña escala si se quiere evitar un nuevo frente de pérdida de biodiversidad».
El equipo propone ampliar las zonas de exclusión a las Áreas Importantes para la Conservación de las Aves y la Biodiversidad (IBA), lo que aumentaría la superficie protegida hasta un 26%. No obstante, muchas de estas áreas ya albergan instalaciones en funcionamiento, por lo que grandes zonas sensibles seguirían expuestas.
Hacia un equilibrio entre energía y biodiversidad
Los científicos reclaman una planificación energética más precisa, basada en información de telemetría y datos de comportamiento animal. Solo así —afirman— será posible garantizar la protección de las zonas de dispersión juvenil y aplicar medidas eficaces, como el refuerzo de la seguridad en líneas eléctricas para evitar electrocuciones.
El desafío, concluyen, no es menor: compatibilizar la lucha contra el cambio climático con la conservación de la fauna más amenazada.
La UE abre las puertas al pollo de Marruecos con un millón de toneladas que no cumplen siquiera la normativa europea.
Mientras en España, el primer productor de la UE, se desata una misteriosa gripe aviar que obligará a sacrificar miles de aves.
Según la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), los productores de pollo acumulan pérdidas de más de 32 millones de euros. Cuyos costes de producción superan lo que los intermediarios les pagan a los granjeros, habiendo aumentado un 35% el precio del pollo en los supermercados, cuando los granjeros no están percibiendo este incremento.
CÓMO EL WEF QUIERE CONTROLAR LO QUE COMES
¿Alguna vez te has preguntado por qué el Foro Económico Mundial (WEF), ese club exclusivo de Davos para multimillonarios y burócratas, se obsesiona con tu plato?
No se trata de salvar el planeta. Se trata de control.
Spoiler: pagarás más, comerás menos y no poseerás nada. Pero ellos llegarán en aviones privados para darte lecciones.
Olvídate del bistec: Jim Hagemann Snabe, jefe de Siemens, hablando en el WEF, se entusiasma con "reinventar" los sistemas alimentarios para "cero carbono." Afirma que el 21% de las emisiones de CO2 provienen de la carne y que 1 billón de personas deberían simplemente dejar de comerla.
Si cree que la gente va a comer esa porquería cultivada en laboratorio de Gates & Co., está equivocado.
Tu "Billetera de Carbono" – la correa digital: El WEF está impulsando rastreadores para monitorear "dónde viajas... qué comes, qué consumes," todo en nombre del cero carbono. Los defensores de la privacidad están gritando que esto es injusto – es "patrullar las emisiones a nivel personal," vinculándolo con Identidades Digitales para un control total.
¿Excedes tu "límite"? No hay vuelo, no hay bistec, no hay libertad.
Impuestos a los ganaderos: En la COP29, oradores alineados con la ONU declaran que el cambio climático es causado en un 20% por la carne y los lácteos, por lo que los productores de carne y lácteos deberían pagar por el daño que causan. Dinamarca lidera la iniciativa con un impuesto al ganado: 100 dólares por vaca al año para 2030, aumentando a 43 dólares por tonelada de CO2.
Sin embargo, esta decisión solo aplasta a los pequeños productores, ya que las grandes agroindustrias pueden fácilmente subir los precios y hacerse aún más ricas.
No más café: El banquero suizo Hubert Keller en el WEF: "Cada vez que tomamos café, básicamente estamos poniendo CO2 en la atmósfera" – 15-20 toneladas por tonelada de granos. ¿Estás listo para abandonar tu ritual matutino para "salvar el planeta"?