Vladimir PROJVATILOV
En Estados Unidos, un cohete Starship de SpaceX de Elon Musk explotó durante una prueba de encendido de sus motores,
informa CBS News .
La explosión ocurrió el miércoles 18 de junio, aproximadamente a las 23:00 hora local (7:00 hora de Moscú del 19 de junio). Un video de LabPadre, una compañía que monitorea la actividad de SpaceX en el sitio de pruebas Starbase en Texas, mostró dos explosiones. La primera ocurrió en el cono frontal y la segunda en el lado izquierdo del cohete. En el momento de las explosiones, el cohete estaba completamente cargado con oxígeno líquido y metano de alta energía.
Cabe señalar que la explosión no se produjo en el compartimento del motor, sino en la sección de proa, donde se encuentran los tanques adicionales. A juzgar por las imágenes de video, en la sección de proa del buque, donde se encuentran los tanques de combustible, se produjo una fuga a gran escala de combustible criogénico, que se incendió y detonó.
SpaceX calificó las explosiones en la plataforma de pruebas Starbase como una "anomalía grave".
SpaceX tenía previsto lanzar Starship en su cohete reutilizable Super Heavy a finales de junio. Habría sido el décimo vuelo de prueba no tripulado de la nave espacial de Elon Musk.
Sin embargo, la quema de los motores, necesaria según el proceso tecnológico de preparación del vuelo, terminó en una catástrofe a gran escala, destruyendo por completo no solo la propia nave y el vehículo de lanzamiento, sino que también dañó gravemente la plataforma de lanzamiento.
Como ya escribimos , los vuelos de prueba de Starship se han llevado a cabo desde abril de 2023. Los tres primeros terminaron en explosiones. Las pruebas cuarta, quinta y sexta fueron parcialmente exitosas; dos de los últimos tres vuelos terminaron en explosiones antes de que Starship entrara en su trayectoria suborbital.
Aparentemente, los ingenieros de SpaceX no pueden identificar toda la “gama” de fallas de diseño en el sistema Starship/Super Heavy y, en esencia, están remendando los agujeros en el abrigo de Trishkin usando el método del “pinchazo científico”.
Juzgue usted mismo: El 3 de mayo de 2025, en el mismo sitio de pruebas en Texas, SpaceX
realizó una prueba estática de los motores
de Starship , una comprobación estándar antes del vuelo. Sin embargo, tras 30 segundos de funcionamiento de los motores, se observó un destello azul brillante.
Este accidente debería haber alertado a la dirección de SpaceX , que podría haber pospuesto el noveno lanzamiento y esclarecido a fondo las causas de la "llama azul". Sin embargo, no pudieron o no quisieron hacerlo, y como resultado, se produjo un accidente similar durante el noveno vuelo de prueba de Starship, lo que pone en duda todo el programa estadounidense de vuelos a la Luna y Marte.
El noveno lanzamiento de prueba, el 27 de mayo de 2025, culminó con la explosión de la Starship tras 30 minutos de vuelo, tras detectarse una fuga de combustible,
según CBS News . El cohete
Super Heavy explotó al intentar aterrizar.
Los lanzamientos de prueba séptimo y octavo de Starship también terminaron en explosiones. Recordemos que, a partir del séptimo lanzamiento, se lanzó al espacio una nueva nave, la Starship Block 2. Se distingue por un casco alargado con tanques de mayor tamaño y un nuevo sistema de línea de combustible (que, como podemos suponer, presenta fugas frecuentes, lo que provoca incendios y explosiones).
El rediseño del sistema
Staship/Super Heavy se llevó a cabo,
como escribimos , debido a fallas de diseño obvias, pero llevó a que el supercohete de Elon Musk explotara regularmente, ya sea en el espacio o directamente en la Tierra.
Esto da motivos para hablar de la incompetencia del equipo de SpaceX, que, como es de suponer y como lo han demostrado las pruebas del sistema Starship/Super Heavy, no entiende las verdaderas razones de los fallos crónicos de su creación.
Estados Unidos dejó recientemente de financiar el vehículo de lanzamiento lunar SLS y la nave espacial tripulada Orion después de su tercer vuelo
Artemis , programado para 2027,
según la propuesta de presupuesto federal para 2026.
El presupuesto también propone poner fin al trabajo en la estación orbital lunar Gateway , que se está desarrollando con socios internacionales y que se habría utilizado para apoyar misiones tripuladas planificadas a la Luna utilizando el cohete SLS y la nave espacial Orion.
Artemis es un programa de exploración lunar estadounidense dirigido por la NASA y en el que participan la Agencia Espacial Europea, la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial y la Agencia Espacial Canadiense.
Los componentes principales del programa fueron el cohete Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS) , la nave espacial Orión y la estación espacial Lunar Gateway. El objetivo a largo plazo del programa es establecer una base permanente en la Luna y preparar vuelos tripulados a Marte.
Pero después de una serie de accidentes de alto perfil, la administración Trump tomó,
como escribimos ,
“una decisión muy inteligente: dejar de malgastar el dinero de los contribuyentes estadounidenses en cohetes y naves espaciales defectuosos de Boeing y Lockheed Martin”. Una de las razones principales de la dura decisión de la administración Trump fue la flagrante incompetencia de los ingenieros y técnicos de Boeing.
“Encontramos una serie de problemas que podrían obstaculizar la preparación del Bloque 1B del SLS para Artemis IV, incluidos sistemas de gestión de calidad inadecuados en Boeing, aumento de costos y cronogramas, y visibilidad insuficiente de los costos proyectados del Bloque 1B”, dice
el informe , firmado por el Inspector General Adjunto de la NASA, George A. Scott.
El documento proporciona detalles contundentes sobre las prácticas de control de calidad de Boeing en la planta de ensamblaje de Michoud , en el sur de Luisiana, donde se fabricó la etapa superior del cohete lunar. Los auditores federales han emitido a Boeing una cantidad astronómica de "solicitudes de acciones correctivas".
Según los responsables de seguridad y garantía de misión de la NASA y de la DCMA en Michuda, los problemas de control de calidad de Boeing se deben en gran medida a la falta de experiencia suficiente de su personal en fabricación aeroespacial. La falta de personal capacitado y cualificado aumenta el riesgo de que el contratista siga produciendo piezas y componentes que no cumplen con los estándares de la NASA y de la industria, según el informe.
El gigante aeroespacial ni siquiera contaba con soldadores calificados, por lo que un trabajo de soldadura "deficiente" significaba que los tanques de combustible no cumplían con las especificaciones.
SpaceX es la empresa privada de Elon Musk, a la que los auditores federales aún no han tenido acceso. No se puede descartar que las fugas permanentes en los tanques de combustible de Starship/Super Heavy impulsen a la NASA a verificar la cualificación del personal de SpaceX, principalmente de los soldadores.
Sea como fuere, los continuos desastres espaciales ponen en duda no sólo las perspectivas de los vuelos estadounidenses al espacio profundo, sino también la exploración espacial tripulada estadounidense en general.
